La
autoridad de radiación y seguridad atómica del país nórdico tomó
las mediciones en Svanhovd, en el límite entre ambos países. La
explosión, que mató a siete personas y obligó a la evacuaciones de
miles de personas, ocurrió el 8 de agosto. El Gobierno de Putin
testeaba el misil crucero 9M730 Burevestnik.
El
organismo de seguridad nuclear de Noruega está analizando pequeñas
cantidades de yodo radiactivo detectadas en el aire en el norte del
país en los días posteriores a una explosión durante una prueba del propulsor de un cohete en Rusia.
La
agencia nuclear estatal de Rusia, Rosatom, dijo el sábado que siete
personas murieron por la explosión y que el accidente involucró
"fuentes de energía de isótopos", sin dar más detalles.
La
autoridad noruega de radiación y seguridad nuclear, DSA, dijo que
había detectado el yodo radiactivo en su estación de filtro de aire
en Svanhovd, que se encuentra en la frontera con Rusia. Un río
separa los dos países en esa zona. Las muestras fueron recolectadas
del 9 al 12 de agosto, mientras que el accidente en la región de
Arkhangelsk, en el norte de Rusia, ocurrió el 8 de agosto, señaló.
"Actualmente
no es posible determinar si la última detección de yodo está
relacionada con el accidente en Arkhangelsk. La DSA continúa
haciendo análisis más frecuentes", dijo la agencia.
Tales
mediciones de radiación no son inusuales en Noruega, ya que sus
estaciones de monitorización detectan yodo radiactivo entre seis y
ocho veces al año y la fuente generalmente se desconoce.
Aunque
la información provista por agencias rusas estatales y privadas de
noticias fue en un comienzo contradictoria, las autoridades ya han
confirmado que un pequeño reactor nuclear estalló mientras un grupo
de científicos trabajaba en una base militar y centro de pruebas de
misiles en Nyonoksa, un pueblo en las afueras de Severodvinsk. De
acuerdo con medios rusos y con las agencias de inteligencia
estadounidenses citadas por este país, se trataría del motor del
nuevo Burevestnik.
Cinco
científicos y dos militares murieron en el acto, mientras que un
número no especificado de personas resultaron heridas. Los niveles
de radiación en la zona subieron a valores entre 4 y 16 veces lo
normal por el espacio de 90 minutos, de acuerdo con el Servicio
Federal de Hidrometeorología y Vigilancia Ambiental de Rusia
(Rosgidromet) citado por la agencia TASS, antes de normalizarse.
El
accidente ocurrió durante la prueba de un nuevo cohete, el
Burevestnik. Rusia ha estado probando esta arma que tiene la
capacidad de llevar ojivas nucleares desde 2017 y aún dista de estar
operativa, como evidenció el accidente del jueves.
Como
otros misiles de crucero, tales como el Tomahawk estadounidense o el
Kalibr ruso, se trata de un proyectil que tras ser disparado adopta
una altitud y velocidad constante en su camino hasta el blanco. Pero
además, estos misiles tienen una gran capacidad de maniobra, es
decir, de cambiar bruscamente de curso para así evitar las defensas
antiaéreas enemigas, gracias a sus motores a reacción y a sistemas
avanzados de navegación. Se comportan en gran medida como aviones no
tripulados, o drones, y su precisión es muy alta, aunque con un
alcance limitado.
(Con
información de Reuters)
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Fuente:
Noruega detectó yodo radiactivo en la frontera con Rusia tras el accidente nuclear en Severodvinsk, 15 agosto 2019, Infobae. Consultado 16 agosto 2019.
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