La
crisis climática, cada vez acuciante, está acentuando unas
desigualdades pre-existentes tanto en un plano doméstico como
internacional. Las desigualdades de raza, de clase y de género
juegan un papel clave en la recuperación tras una catástrofe
natural, lo cual también se puede aplicar en una comparativa entre
los llamados países del Primer Mundo y los más empobrecidos.
por
William Minter y Imani Countess
Artículo
publicado originalmente en The Global African Worker.
Viene
de la segunda parte.
Acción
climática de base
La
mayoría de activistas por el clima comprenden, al menos en teoría,
que los grupos más vulnerables son los que más sufrirán el cambio
climático, vengan sus desventaja por motivos de nacionalidad, clase,
raza, género o edad. Este impacto desproporcionado viene reflejado
en el liderazgo y las bases de los movimientos climáticos de todo el
mundo.
Las
mujeres, en particular las jóvenes y racializadas, ya no solo
ejercen labores de liderazgo entre bastidores, como en la época de
los derechos civiles en Estados Unidos. Ahora, se han convertido en
muchas de las portavoces más visibles del activismo climático. Las
activistas africanas lideran la lucha climática en dicho continente,
como demuestra la resistencia contra la contaminación en el Delta
del Níger o contra la propuesta de una mina de carbón en Lamu,
Kenia.
La
huelga climática iniciada por la sueca Greta Thunberg ha ganado
apoyo en todo el planeta. Mientras que esta joven es la figura más
conocida, infinidad de otras, muchas de ellas indígenas, han
liderado protestas durante mucho tiempo en varios países. Las
comunidades nativo-americanas en los Estados Unidos se han enfrentado sin
descanso contra oleoductos, continuando sus luchas centenarias por el
acceso al agua y la tierra. La activista adolescente lakota Tokata Ojos de Hierro habló con Thunberg en la Reserva Cresta del Pino en
Dakota del Sur, en octubre de 2019. “Los pueblos indígenas han
liderado estas luchas durante siglos”, afirmaría Ojos de Hierro.
Minimizar
los efectos de la crisis climática depende de dejar de extraer los
combustibles fósiles, el carbón en especial. En China y los Estados Unidos, así como en la Europa occidental, la decadencia del carbón
es fehaciente, como respuesta ante su ineficiencia y contaminación.
Y sin embargo, estas economías también financian y exportan tecnología de este sector. En junio de 2019, un grupo de activistas
keniatas ganaron en los juzgados contra la propuesta de una mina de carbón en Lamu, en la costa, con financiación china y
estadounidense. Esto fue el resultado de iniciativas activistas
locales que se reforzaron y ampliaron con el apoyo de otros grupos
climáticos en el plano nacional e internacional.
Kenia
también es uno de los países que lideran en la innovación de las
renovables. La más popular es la solar fuera de red, que ilumina
millones de hogares en las zonas rurales de África y del Sur
asiático que de otra manera no tendrían acceso a la electricidad. 5
millones de estos mismos hogares pueden también alimentar
electrodomésticos, no solo encender la luz. El crecimiento es
rápido, pero el mercado potencial de personas sin acceso a la
corriente eléctrica es de 800 millones en todo el mundo. Algunos de
sus donantes internacionales incluyen la Agencia de los Estados
Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID por sus siglas en
inglés), aunque otros agentes, como la Power Africa Initiative de
Barack Obama, financian proyectos de combustibles fósiles.
Existe
un gran potencial para una mayor innovación en las energías
renovables. Por ejemplo, cocinar con electricidad de origen solar en
vez de madera o carbón ayudaría a frenar la deforestación y a
prevenir muertes causadas por contaminación o por accidentes con
fuego en la cocina. Para acelerar dicha innovación, requerimos de
más investigación transnacional colaborativa entre países
tecnológicamente desarrollados e investigadores/as locales.
Continúa
en la cuarta parte.
Traducción
de Raúl Sánchez Saura.
Entradas
relacionadas:
Fuente:
William Minter, Imani Countess, El Green New Deal puede y debe ser global III, 13 julio 2020, El Salto Diario. Consultado 16 julio 2020.
No hay comentarios:
Publicar un comentario