En
la reunión preparatoria para la Conferencia de las Naciones Unidas
sobre el Cambio Climático (COP25), que se realizará a fin de año
en Chile, autoridades provinciales y municipales plantearon, entre
otros puntos, la necesidad de revisar la ley de bosques nativos por
entender que complica la expansión de las ciudades. El pedido generó
la respuesta de técnicos y científicos que afirman no haber sido
convocados a esa reunión, aunque sí a un encuentro paralelo, y
sostuvieron que el reclamo va en contra de las acciones "más
elementales" de adaptación al cambio climático.
La
Universidad Nacional de Córdoba, el Conicet, el Instituto
Multidisciplinario de Biología Molecular, el Foro Ambiental Córdoba
y la Coordinadora en Defensa del Bosque Nativo son algunas de las
entidades que no fueron convocadas para la reunión preparatoria
(PreCop). Tampoco estuvieron investigadores de primera línea, como
Sandra Díaz (la multipremiada cordobesa por sus aportes al debate
del cambio climático) y Marcelo Cabido (integrante del Panel
Intergubernamental de Cambio Climático).
"El
encuentro fue cerrado, exclusivamente para funcionarios políticos",
subrayó el biólogo Federico Kopta, del Foro Ambiental. En tanto,
Fernando Barri, biólogo del Conicet, agregó: "Hay indignación
porque quienes estudian y siguen los temas no participaron".
La
Fundación para el Desarrollo de Políticas Sustentables (Fundeps)
colaboró con el área Ambiente de la Agencia Córdoba Joven en una
reunión paralela. Carolina Tamagnini, coordinadora de la entidad,
señaló que como la reunión "no tuvo participación de la
sociedad civil y se invitó solo a algunos técnicos de
universidades, abrimos la convocatoria. Tuvimos mucha diversidad de
representaciones, con discusiones muy interesantes que se volcarán a
un documento que se anexará a las conclusiones de la PreCop".
La
reunión preparatoria avanzó en el pedido de revisión de la ley
nacional de bosques nativos (N º 26.331), sancionada en 2007, por
entender que "ahoga" el crecimiento urbano de algunos
municipios. La norma categoriza al bosque nativo en tres colores,
según el nivel de protección (prohíbe el desmonte total en las
zonas rojas y amarillas). En la reunión preparatoria se pidió, por
ejemplo, incluir como criterio de sustentabilidad la planificación
urbana y periurbana, y que se avance en un proceso más participativo
de ordenamiento del territorio. El documento final incluyó la idea
de fomentar la forestación rural y crear una red de viveros públicos
para aumentar la oferta en calidad y diversidad de especies.
"Eufemismo"
Javier
Britch, secretario de Ambiente de Córdoba, afirmó que la reunión
preparatoria "no se armó para abordar la ley de bosques. Esa
fue una de las mesas. Técnicos de 15 provincias del país acordaron
que hay un problema en el área de ordenamiento territorial de los
bosques nativos, pero el encuentro no se hizo para eso".
Para
Kopta el planteo sobre el punto es un "eufemismo" para que
se autorice el desmonte para la expansión inmobiliaria. "Hay
que proteger laderas porque en lugares llanos no queda casi nada de
especies nativas", describió. Barri indicó que los desmontes
que se están pidiendo afectan la dinámica del clima, alteran el
efecto "esponja" -que ayuda a mantener el equilibrio
hídrico- y rompen con las "islas" que bajan la
temperatura. "Avanzar en ese sentido sería un suicidio
planetario", añadió.
Según
Britch, lo más importante de la reunión preparatoria fue coincidir
en que hay que agilizar el mecanismo para acceder directamente al
financiamiento internacional para realizar acciones de mitigación
del cambio climático. La declaración final pidió a Naciones Unidas
que constituya un foro paralelo a la COP con representantes
subnacionales.
Fuente:
Preocupación de científicos por bosques nativos en Córdoba, 16 agosto 2019, La Nación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario