Dossier Patagonia No Nuclear. Entrevistamos al economista, historiador y ecologista Antonio Elio Brailovsky a propósito del plan nuclear que acordó Macri con China e incluye una central nuclear en la Patagonia.
por Roberto Andrés
Antonio Elio
Brailovsky es Licenciado en Economía política de la UBA,
historiador, ecologista y docente universitario. Además, fue
Defensor del Pueblo en la Ciudad de Buenos Aires y autor de una serie
de libros, entre ellos Esta, nuestra única Tierra.
Hay un sector de
la sociedad que tiende a invisibilizar las amenazas de la energía
nuclear, especialmente en algunos círculos universitarios ligados al
sector. ¿Qué pasa en las universidades?
“La enseñanza
universitaria esta manejada por los sectores económicos que manejan
la matrícula y que manejan los grandes negocios en cada una de las
profesiones. Es decir, la enseñanza universitaria en medicina esta
manejada por los hombres de laboratorio, la enseñanza universitaria
en arquitectura está manejada por los grandes estudios de
arquitectura, y así. De este modo, el rol de la universidad, tanto
estatal como privada, no es el pensamiento crítico sino que la
reproducción de lo que existe reforzando las estructuras de poder
que existen. En mi opinión este es el motivo por el cual hay tanta
adhesión a esta decisión”.
“A lo largo de
la historia los ricos siempre se las arreglaron para que los pobres
les financiaran las cosas”
“Con respecto
al proyecto, yo creo que el principal problema de fondo no es esta
discusión de si puede explotar o puede explotar mañana, sino cuál
es la lógica, cuál es la racionalidad de un proyecto de energía
nuclear para producir electricidad, teniendo en cuenta que son
subproductos de proyectos militares desarrollados en el primer mundo.
A lo largo de la historia los ricos siempre se las arreglaron para
que los pobres les financiaran las cosas. En este caso, si China nos
vende centrales atómicas, estamos financiando el desarrollo nuclear
de China, porque se abaratan los costos. El beneficio económico
chino es absolutamente claro, es economía de escala: cuantos más
clientes tenga, más barato me salen las cosas. La pregunta es cuál
es el beneficio nuestro”.
“Una central
atómica produce energía durante una generación y problemas de los
que hay que ocuparse maniáticamente durante un tiempo indefinido”
“Si uno piensa
en términos de racionalidad, una central atómica produce energía,
es decir beneficios, durante una generación, 30, 40, 50 años, y
genera problemas de los que hay que ocuparse maniáticamente para que
no haya desastres durante un tiempo indefinido. Es decir, el único
Gobierno del mundo que se tomó en serio el tema de sus residuos
radioactivos es el de Finlandia, con el único repositorio que se
está construyendo en el mundo y que se van a tardar un siglo por la
enorme magnitud de la obra, mucho más grande que una gran pirámide
subterránea, y los finlandeses se plantean cuáles son las técnicas,
los procedimientos para mantenerlo aislado de la biosfera por un
millón de años. Recomiendo ver un documental, Into Eternity, que es
sobre los problemas que genera mantener algo aislado, construir algo
para mantener aislado los residuos radioactivos durante más de un
millón de años. Entonces uno piensa ¿cuál es la racionalidad de
darle electricidad a la gente durante 50 años y generar un problema
por otro millón de años?, ¿cuánto nos cuesta atender el problema,
insisto, sin hipótesis de desastres, cuánto nos cuesta entender el
problema?, ¿cuánto cuesta el café que los tipos se van a tomar
mirando durante un millón de años los controles para que no pase
nada? ¿Cuánto cuesta el colectivo para que lleguen de su casa hasta
el basurero nuclear durante un millón de años, y etcétera. Cuando
uno mira esto, dice: “Esto carece de racionalidad”. Y los gastos
los pagan tus hijos, mis hijos, durante un millón de años. Teniendo
en cuenta lo siguiente: no es cierto que los residuos radioactivos
permanezcan peligrosos por 4 mil o 25 mil años, o cosas así. El
plutonio pierde su radioactividad en algo así como 140 mil años,
pero sigue siendo toxico, tiene toxicidad química, o sea, mientras
haya vida en la Tierra, los residuos en las centrales atómicas
siguen siendo peligrosos. Lo primeros 140 mil años son peligrosos
por radioactividad, y después porque son sustancias químicas
toxicas. De modo que otra vez la pregunta es, si criticamos al
presidente por comprometer a nuestros descendientes con la deuda
externa por solamente 100 años, aquí estamos comprometiendo el
medioambiente por cientos de miles de años”.
¿Existe en
Argentina la capacidad para hacerse cargo de los desechos? ¿Existe
la seguridad?
“Se compra.
Cualquier cosa se compra. Se saca de educación, de la salud, de la
infraestructura. El tema es, la educación se puede postergar, la
salud se puede postergar, y no pasa nada. Solamente la gente se
enferma un poco, o se muere un poco. Pero las instalaciones de
altísimo riesgo hay que atenderlas sí o sí. De modo que será la
prioridad del gasto. También te condiciona el gasto unos cuantos
milenios. Así de grave es, y así de loco es. Lo de la seguridad es
un diálogo de sordos, lo importante es que estamos condicionando a
nuestros descendientes por cientos de miles de años”.
Fuentes:
Roberto Andrés @RoberAndres1982, Antonio Elio Brailovsky: “Estamos comprometiendo el medioambiente por cientos demiles de años”, 30/09/17, La Izquierda Diario. Consultado 30/09/17.
La obra de arte que acompaña esta entrega es "El Alquimista", de Joseph Wrigth of Derby, pintado en 1771. Muestra el momento en que el alquimista Henning Brandt descubre el fósforo y su propiedad de brillar en la oscuridad. Esa luminosidad lo lleva a arrodillarse y rezar. Una actitud de tanta convicción religiosa, como la que nosotros mismos tuvimos al creer, sin una revisión crítica, en la promesa nuclear.
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