viernes, 28 de marzo de 2014

La policía de Gildo Insfrán baleó a dos niños wichí

Sucedió en la localidad de Ingeniero Juárez el viernes pasado. Uno de ellos continúa internado.

La violencia y el amedrentamiento a las comunidades indígenas es una práctica habitual de la policía formoseña en Ingeniero Juárez, según explican los wichís de esa localidad. El viernes pasado dos chicos de 12 y 13 años sufrieron las consecuencias de estos ataques cuando recibieron los impactos de bala de plomo de las fuerzas locales.

Sucedió cuando la policía comenzó a realizar su habitual recorrida nocturna por el Barrio 50 viviendas. Un patrullero pasó en varias oportunidades por la Plaza Juan Domingo Perón donde 5 jóvenes de la etnia wichi se encontraban sentados y comenzaron a perseguirlos para que se fueran de allí. Cerca de las 22 horas comenzaron a escucharse disparos; las balas de plomo que tiró la policía alcanzaron a Franco Santillán de 13 años y Nazareno Chávez de 12 que se encontraban en el portón de su casa. “Justo pasa el tiroteo y los chicos estaban ahí en el portón de su casa jugando, porque la familia (de Franco) vive cerca de la plaza” dijo el referente de la comunidad Agustín Santillán.

El sábado, Nazareno fue trasladado al Hospital del Niño y la Madre de Formosa y en la guardia del centro de salud confirmaron que fue ingresado por un impacto de bala en su rodilla izquierda. Franco también recibió un impacto a la altura de las piernas, fue al hospital local y ahora se encuentra en su casa, pero la familia está tratando de que reciba atención médica allí.

Al parecer, estos incidentes son frecuentes en Juárez, en donde se desarrolla el plan “30 días”, que consiste en una rotación mensual de efectivos que viajan desde Formosa capital. Santillán dijo que la policía “tiene orden de su jefe de tirar para que la gente no esté en la plaza porque el problema es que a la noche dicen que no dejan dormir a los vecinos y les tiran a los chicos aborígenes. Varias veces tiraron balas a la gente porque tenemos la costumbre de dormir afuera cuando hace calor. Ellos dicen que tiraron balas de goma, pero es mentira, son balas calibre 36”, concluyó.

Como prueba de este feroz ataque, algunos testigos pudieron sacar fotos en las que se ven los proyectiles tirados en las cuadras linderas a la plaza y vestigios de sangre de las jóvenes víctimas.

Fuente:

No hay comentarios:

Publicar un comentario