sábado, 13 de abril de 2013

Doce pianos y mucha historia bajo el agua


El conservatorio Gilardo Gilardi, el más prestigioso centro de formación musical bonaerense, se anegó con las lluvias.

por Pablo Morosi

La Plata. El repiqueteo de martillos, el bramido de una agujereadora y el sordo y persistente goteo que brota de las paredes aún empapadas del Conservatorio Musical Gilardo Gilardi, principal referencia en la formación de músicos de la provincia, reemplazaron a las armonías de pianos, cuerdas y el latido de los timbales.

La inundación de media ciudad afectó seriamente a la histórica mansión Servente, de estilo neolombardo, situada en el barrio de Ringuelet donde funciona la institución, a la que asisten unos 1500 alumnos.

En el subsuelo del conservatorio están las aulas en las que se enseña lenguaje musical. Allí, el agua de la inundación del 2 del actual llegó a los dos metros de altura y alcanzó a doce de los veinte pianos -tres habían sido adquiridos en el último año por la cooperadora- que posee el establecimiento, además de a medio centenar de instrumentos de percusión.

Nueve pianos verticales, dos de cola y uno eléctrico. Además de xilofones, tambores, claves, cejas, maracas y panderos yacen, algunos destartalados, entre el pasillo y una de las aulas más amplias del subsuelo. Andrea Pierri, docente en percusión, mira con desconsuelo y suspira.

En total, las pérdidas de instrumentos oscilan alrededor de los 500.000 pesos, según el cálculo que hizo el director del conservatorio, Gerardo Guzmán, quien estimó que sólo en mayo el lugar podría funcionar con cierta normalidad, siempre y cuando consigan restaurar algunos de los instrumentos, su principal herramienta de trabajo.

Varios luthiers de la ciudad se ofrecieron a realizar la tarea, pero antes deben evaluar si lo rescatado puede, o no, salvarse de un deterioro irreversible. En el hall de acceso al edificio, las autoridades apilaron bancos, sillas, pupitres y escritorios. Con botas de lluvia y barbijo, docentes, alumnos y auxiliares emprenden las tareas de recuperación y de limpieza provistos de tachos con agua y lavandina. Sólo pueden hacerlo de día porque la energía eléctrica del edificio aún no fue restablecida.

A través de Facebook, la comunidad educativa del conservatorio se autoconvocó.

Ayer a la mañana, con un trapo y su correspondiente tacho con lavandina el pianista Rubén Distéfano, profesor de la casa, refregaba la pared de uno de los pasillos. Hace más de treinta años que está ligado a la institución, primero como alumno y luego como docente. "Ésta es mi casa, no puedo hacer otra cosa que estar acá tratando de ayudar", contó. A su lado, los alumnos José Klug, Belén Gil e Irene Rodríguez intentaban limpiar otro piano y recibían instrucciones de la inspectora del establecimiento, María Marta Reyes.

Otro de los lugares de la ciudad afectados por el temporal fue el zoológico platense, donde se registró la muerte de cinco animales y los destrozos provocaron el cierre del predio.

Si bien el director del tradicional paseo platense, Diego Balducci, informó a La Nación sobre el deceso de cinco animales, dijo también a la prensa local que los ejemplares fallecidos por el temporal fueron 30. Por otro lado, se indicó oficialmente que otros ejemplares sufrieron afecciones respiratorias provocadas por la lluvia y el frío.

Consultado sobre el tiempo en que el paseo permanecerá cerrado al público, Balducci estimó que no será inferior a un mes, por cuanto no sólo habrá que reparar las jaulas, recintos y corrales que resultaron afectados en su totalidad, sino que deben estar garantizadas las condiciones de salubridad del predio. En tanto, lo más conveniente para los animales es que estén en otro lado. Por eso, solidariamente, están recibiendo los ejemplares platenses los zoológicos de Buenos Aires, Florencio Varela, Cañuelas, Temaikén, América, Batán y la ciudad de Córdoba.

En tanto, por las redes sociales se convocó a una jornada de reencuentro para personas que hayan perdido o encontrado mascotas durante la tormenta. La cita será el próximo domingo, a las 10, en la plaza Islas Malvinas.

La Dirección de Zoonosis Urbana estimó que más de 25.000 perros fueron afectados y muchos de ellos permanecen perdidos, por lo que entidades defensoras de animales propusieron concurrir con los animales encontrados o fotos para que los dueños que los buscan puedan reconocerlos.

El Ministerio de Salud bonaerense, por su parte, inició una campaña de vacunación gratuita contra la rabia y la leptospirosis para gatos y perros afectados por el temporal. El director de Zoonosis Urbana, Daniel Simón, explicó que con la campaña se busca disminuir el riesgo de que se enfermen los animales y que transmitan las afecciones a sus dueños.

"El agua y el barro son el medio donde se multiplica la bacteria leptospira, y los roedores y los perros son transmisores de la enfermedad", sostuvo el especialista, y dijo que también serán vacunados los perros de la calle y los que se encuentren perdidos.

Las secuelas de la tormenta

Cuantiosos daños en la mansión Servente, de Ringuelet

Pianos destrozados
Doce de los veinte pianos del conservatorio quedaron durante horas flotando en dos metros de agua

Medio millón de pesos
Las pérdidas por los daños sufridos en instrumentos de cuerdas y de percusión suman $ 500.000

Sin clases hasta mayo
El conservatorio tiene alrededor de 1500 alumnos, que no tendrán clases hasta mayo

Fuente:
Pablo Morosi, con la colaboración de Eduardo D'Argenio, Doce pianos y mucha historia bajo el agua, 11/04/13, La Nación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario