Un
nuevo estudio publicado este lunes desmintió que las comunidades
indígenas sean grandes deforestadoras de la Amazonía peruana, al
confirmar que los asentamientos de ese segmento de la población que
poseen la propiedad sobre los bosques presentan una pérdida de los
mismos mucho menor al promedio nacional.
La
investigación, impulsada por el Instituto del Bien Común (IBC) con
el apoyo de la Cooperación Alemana para el Desarrollo en el marco
del proyecto ProTierras Comunales, ratifica los resultados de otros
informes similares de 2014 donde se probaba que los territorios
indígenas actúan como barreras contra la deforestación.
El
reporte a cargo de los especialistas del IBC Sandra Ríos y Ermeto
Tuesta abarca 15 años (2001-2015) de deforestación en 1.351
comunidades nativas.
En
ese plazo Perú perdió 1,9 millones de hectáreas de bosques
amazónicos, de las que solo el 17 % se dio dentro de las comunidades
nativas con derecho sobre sus tierras. Se trata de un porcentaje
menor al 19 % de los 70,4 millones de hectáreas de bosques que en
2001 estaban en poder de asentamientos indígenas.
Deforestación
baja y sostenible
Esto
significa que el promedio anual de deforestación de las comunidades
nativas entre 2001 y 2015 fue de 22.247 hectáreas, mientras que
fuera de ellas fue de 128.858 hectáreas, incluidas las áreas
naturales protegidas.
Esa
tasa de deforestación arroja un promedio per capita de 0,86
hectáreas por cada indígena que habita en las comunidades nativas,
lo que para los autores del informe “puede ser considerado bajo”.
El
reporte recordó que las comunidades nativas no están exentas de la
intervención humana de sus propios habitantes y, por lo tanto, de
una deforestación mínima y sostenible como parte de un sistema de
roza y quema para establecer sus cultivos.
Así,
el 89 % de las 1.351 comunidades nativas estudiadas presenta una
deforestación por debajo de las 500 hectáreas a lo largo de esos 15
años, y en el 45 % esa pérdida es incluso menor a 100 hectáreas.
Casos
excepcionales
Sólo
15 comunidades presentan una deforestación mayor a las 2.000
hectáreas y los motivos varían en función del lugar, pero la
mayoría tiene en común la presión de alguna actividad
deforestadora como puede ser la agricultura migratoria o extensiva,
la tala ilegal, los cultivos ilícitos de hoja de coca o la minería
ilegal.
Apenas
dos comunidades registran una deforestación mayor a las 6.000
hectáreas. Ambas son de etnia awajún y se encuentran en la región
de San Martín, la zona amazónica de Perú con más superficie
deforestada con relación a su territorio a causa del avance de
plantaciones agrícolas como café, plátano y arroz.
Una
es Huascayacu, con casi 7.600 hectáreas deforestadas que
representaban el 78 % de sus bosques; y la otra es Shampuyacu, con
más de 6.800 hectáreas perdidas, que son el 86 % del área boscosa
que tenía en 2000.
Ellas
encabezan el ránking de comunidades con más extensión de bosque
perdida. La causa es la tardanza para otorgar el título a la
comunidad, lo que provocó que sus territorios fueran invadidos por
gente migrada de los Andes que les ofrecieron alquilar sus tierras
para la agricultura, lo que los nativos aceptaron con presiones.
No
es una cuestión étnica
La
investigación descartó el factor étnico como un agente de
deforestación, pues hay otros asentamientos awajún que también
encabezan el ránking de las comunidades menos deforestadas, como
Shacham Entsa, en la región de Amazonas, que no perdió ni un metro
cuadrado de sus bosques.
En
ese sentido, el reporte estableció una relación entre la densidad
de población de las comunidades nativas y la superficie deforestada.
El
promedio de hectáreas de bosque por habitante de comunidades nativas
en Perú es de 32 hectáreas, y los investigadores encontraron que la
deforestación es mayor en aquellas comunidades donde el espacio de
bosque para cada indígena es menor a ese promedio.
Menos
hectáreas, más deforestación
Todas
las comunidades con una deforestación de más del 5 % de su área
tienen menos de 10 hectáreas de bosque disponibles por habitante.
“No
se han evaluado variables como el estado del bosque y los recursos y
servicios que brindan a los indígenas para sus necesidades básicas
y para una buena calidad de vida”, apuntó a Efe Sandra Ríos,
autora del informe.
Con
ello, la investigación concluyó que hay muy pocas comunidades
indígenas que se puedan calificar de “deforestadoras” porque “la
gran mayoría ha logrado mantener su bosque en los 15 años
estudiados, a pesar de presiones externas e internas”.
Fuente:
Los bosques amazónicos bajo propiedad indígena apenas sufren deforestación, 23 junio 2020, EFEverde.
No hay comentarios:
Publicar un comentario