Un
informe realizado por diversas organizaciones ambientales alrededor
del mundo reveló que "la industria minera ha sido declarada
'esencial' en muchos países, permitiéndole seguir operando con
resultados devastadores".
La
industria minera global está aprovechando la crisis del coronavirus
para profundizar el extractivismo, promover la "desregulación"
de la actividad y la "represión" de los movimientos
sociales que la combaten, según un informe difundido por siete
organizaciones ambientalistas que actúan a nivel internacional.
"Voces
desde el suelo: cómo se beneficia la industria minera mundial de la
pandemia COVID-19", se llama el relevamiento que para Argentina
menciona el caso de "la empresa canadiense Yamana Gold", a
quien acusa de "aprovechar la cuarentena impuesta en todo el
país, para avanzar en su proyecto" de extraer oro y plata en la
localidad de Esquel, a pesar de que "la minería (a cielo
abierto) ha sido prohibida desde 2003, debido a la oposición
generalizada".
En
líneas generales, el informe denuncia que "la industria minera
ha sido declarada 'esencial' en muchos países, permitiéndole seguir
operando con resultados devastadores".
El
estudio fue elaborado en conjunto por las organizaciones Earthworks,
Institute for Policy Studies-Global Economy Program, London Mining
Network, MiningWatch Canada, TerraJust, War on Want and Yes to Life
No to Mining; a partir de "reportes desde los territorios
afectados, y en una revisión de casi 500 artículos de prensa, e
informes de las empresas y la sociedad civil".
"Es
la primera vez que producimos un informe de estas características",
dijo a Télam Kirsten Francescone, coordinadora para América Latina
de MiningWatch Canadá.
La
activista enfatizó que la "preservación de la salud y la
supervivencia planetaria no pueden depender de las empresas mineras"
que actúan guiadas por una "despiadada búsqueda de ganancias".
"Las
mineras están avanzando aprovechando que la actividad se considera
esencial y la gente no puede salir a protestar. El extractivismo que
nos llevó a esta pandemia, en lugar de plantear otra forma de vida,
está más voraz que nunca", dijo a Télam Viviana Moreno,
integrante de la asamblea de vecinos autoconvocados "No a la
Mina de Esquel".
Una
actividad muy cuestionada
Después
de multitudinarias marchas y el histórico plebiscito no vinculante a
través del cual el 81 % de esta localidad chubutense le dijo "No"
al proyecto de extraer oro y plata del Cerro Tres Torres -distante 6
kilómetros de Esquel-, la legislatura provincial aprobó la Ley
5.001 que prohibió la actividad minera metalífera a cielo abierto y
la utilización de cianuro en los procesos de producción.
Desde
entonces, los asambleístas y ambientalistas vienen resistiendo
diferentes intentos de flexibilizar esta ley -aún vigente- o de
eludirla.
"Después
de más de 6 años de no saber nada de Yamana Gold, la minera se
asoció con dos empresarios argentinos para explotar estos metales en
el mismo cordón Esquel, pero en modalidad subterránea con método
de flotación", dijo esta bioquímica nacida hace 62 años en
Rosario que hace más de 17 vive en Esquel.
La
modalidad "está como bordeando la 50.01", pero confió en
que no podrán implementarlo porque "no tienen la licencia
social ni la tendrán".
Moreno
afirmó que la estrategia de las mineras es tratar de convencer a la
opinión pública de que "la salida es la mega minería";
mientras que "el slogan de todos los movimientos sociales y
gremios es 'esta crisis no se resuelve con mega minería'".
La
primera de las cuatro conclusiones principales del estudio global
señala que "las empresas mineras ignoran la pandemia y
continúan operando", con el resultado de que los yacimientos
"se han vuelto puntos de contagio, poniendo en grave riesgo a
los trabajadores y a las comunidades aledañas, muchas de las cuales
ya sufren impactos en la salud por la minería".
La
segunda conclusión es que "las empresas mineras y los gobiernos
están utilizando la crisis para asegurar cambios regulatorios que
favorecen a la industria a costo de las personas y el planeta".
En
tercer lugar, el informe concluye que "los gobiernos de todo el
mundo están callando protestas legítimas" contra el sector
minero, con el resultado de que los manifestantes "están
enfrentando mayores riesgos a su seguridad".
La
cuarta conclusión es que las mineras "están utilizando la
pandemia como una oportunidad para lavar su imagen".
El
informe cita los casos de Barrick Gold, que "realizó
importantes donaciones en efectivo a gobiernos africanos"; del
gigante minero Vale, que "compró millones de tests para sus
operarios"; o de Newcrest Mining que "donó millones para
la investigación de vacunas".
Fuente:
Acusana las mineras de aprovechar la pandemia para profundizar el extractivismo a nivel global, 2 junio 2020, Télam. Consultado 5 junio 2020.
No hay comentarios:
Publicar un comentario