Foto: La Voz |
Un primer análisis del estudio de impacto ambiental muestra que cinco alternativas a la traza propuesta fueron descartadas por criterios puramente "técnicos". Sin embargo, casi ningún criterio social o ambiental fue usado en esta decisión. Una elección sin participación ciudadana.
por Tiago Nabis
El estudio de
impacto ambiental de la cuestionada autovía de montaña proyectada
en el valle de Punilla ha tomado estado público luego del visto
bueno de la Comisión Técnica Interdisciplinaria de la Secretaría
de Ambiente de la provincia de Córdoba. Este es el primer paso hacia
la audiencia pública, que se realizará el 11 de mayo a las 9:00 en
el Club Deportivo Santa María, en la localidad de Santa María de
Punilla.
El estudio que se
encuentra disponible en la página de la Secretaría de Ambiente
examina exclusivamente el impacto ambiental de la ruta conocida como
"pedemontana". Antes de examinar esta alternativa, se
impone realizar una pregunta: ¿Cómo se eligió esta traza? A
primera vista no parece una elección clara, tiene un costo altísimo
(ocho veces superior al promedio que se paga en Latinoamérica),
afecta bosque nativo con el máximo grado de protección, atraviesa
una mina de uranio y requiere grandes voladuras en los cerros que
afectan el valor paisajístico y la calidad de vida.
Conocemos que
existen alternativas a la traza propuesta. En 2011, el Instituto de
Planificación del Área Metropolitana (IPLAM) previó la
construcción de una autovía por el este de las localidades, con una
traza próxima a las mismas. Sólo un 4,4% de dicha traza se
realizaría sobre bosque nativo en categoría roja. Por otra parte,
el 20 de noviembre de 2016 Osvaldo Vottero, presidente de Vialidad
Provincial, declaraba en La Voz del Interior: "En principio todo
indica que la opción recomendable será abrir la autovía al oeste
de la actual ruta 38, es decir, a la izquierda si se viaja de Bialet
Massé a La Falda". El material ahora disponible en la página
de la Secretaría de Ambiente permite conocer detalles sobre estos
proyecto y revela la existencia de seis alternativas en total.
Las seis alternativas
Digitalización propia de La Izquierda Diario, a partir del documento "Evaluación comparada de las alternativas de proyecto".
Las seis alternativas
Digitalización propia de La Izquierda Diario, a partir del documento "Evaluación comparada de las alternativas de proyecto".
La alternativa 0
se reduce a una mejora de la ruta actual, con algunas innovaciones
como la duplicación del puente sobre el río Cosquín.
La alternativa
IPLAM involucra también mejoras en la RP E55 bordeando el lago San
Roque y de la RN 38 en su trayecto en Bialet Massé, para seguir
luego la margen oriental del río Cosquín, aprovechando calles
preexistentes.
La alternativa 1
"pedemontana", es la propuesta final elegida por la
provincia y cuestionada por vecinos y ambientalistas. Implica una
traza totalmente nueva desde el fin de la variante Costa Azul hasta
el camino del Pan de Azúcar, ubicada hacia el este de las
localidades del Valle de Punilla.
La alternativa 2
implica duplicar RP E55 a la altura de la Comuna de San Roque,
siguiendo luego en líneas generales el trazo de la alternativa 1.
La alternativa 3
también implica duplicar la RP E55 en Comuna San Roque, atravesar la
zona urbana de Bialet Massé y realizar un traza nueva por el oeste
de las localidades del valle hasta Cosquín.
La alternativa 4
es similar a la anterior, se diferencia por una traza aún más hacia
el oeste, utilizando caminos vecinales preexistentes.
Cronológicamente,
la propuesta del IPLAM fue realizada en 2011 como parte del informe:
“Lineamientos del Plan Estratégico Urbano Territorial del Área
Metropolitana de Córdoba. Definición del Plan Vial y Uso del
Suelo”. En el año 2015 el Instituto de Investigación de Servicios
Públicos e Infraestructura de la Facultad de Ciencias Exactas
Físicas y Naturales de la Universidad Nacional de Córdoba (IISPI)
evalúa una mejora de la vía actual (alternativa 0) y dos
alternativas por el oeste de las localidades (alternativas 3 y 4). En
2017 este mismo instituto analiza las realizar la autovía por el
este (alternativas 1 y 2). Es misma institución es la que realiza la
selección de las alternativas y el estudio de impacto ambiental de
la alternativa seleccionada.
¿Cómo se eligió
la alternativa "pedemontana"?
La elección es
en base a una serie de criterios, a cada uno se les asigna cierta
ponderación (de esa forma, algunos son considerados más
"importantes" que otros) y finalmente se obtuvo una
puntuación para cada proyecto.
En la elección
de los criterios está el primer problema. Estos criterios fueron: 1)
aspectos hidráulicos, 2) número de puentes, 3) número de accesos,
4) longitud del recorrido, 5) tiempo de viaje, 6) volumen de suelo,
7) pérdida de suelo, 8) efecto barrera, 9) accidentes, 10)
expropiaciones (no edificadas) 11) expropiaciones (edificadas) y 12)
costo total. Entre éstos, se consideró de máxima importancia que
la ruta no produzca accidentes, no actúe como barrera urbana y que
minimice el tiempo de viaje. Todo esto llevó a la elección de la
alternativa 1 "pedemontana".
Salvo por la
acertada atención a los posibles accidentes viales, no se consideran
aspectos ambientales o sociales en esta elección. Tampoco se aclara
cómo se ponderaron estos criterios elegidos y de por qué, por
ejemplo, se asignó importancia máxima a minimizar el tiempo de
viaje siendo que la diferencia entre las diferentes propuestas es de
pocos minutos. Ni siquiera podemos saber cuáles serían los costos
ambientales de las restantes alternativas, ya que el estudio de
impacto ambiental (que analizaremos en otra nota) se realizó sobre
una sola de ellas.
Un habitante de
cualquiera de las localidades del valle de Punilla, ¿no se
interesaría por otros aspectos además del tiempo de viaje? Podría,
por ejemplo, interesarle que cuatro de las seis alternativas no
implican destruir remanentes de bosque nativo de máximo valor para
la conservación. Que cuatro de las seis no atraviesan minas de
uranio ni implican grandes voladuras de la montaña. Sólo para tener
en cuanta, la protección de laderas luego de construida la ruta
insumirá $ 575.470.500, es el segundo rubro más caro del
presupuesto, representando el 18,6 % del total.
¿Qué
trasportará la nueva ruta?
Indudablemente,
años de mala planificación urbana volvieron obsoleta e incluso
peligrosa a la ruta 38 y es necesaria una vía alternativa. El
tránsito se incrementa en verano por la adición del tránsito
turístico.
En promedio, por
la ruta 38 circulan más de nueve mil vehículos por día, un número
similar al de la autopista Córdoba - Rosario. Según se detalla en
el propio estudio de impacto ambiental, el tránsito de autos y
camionetas representa 91,3 %, los ómnibus un 3,4 % y los camiones
5,3 %. Además del turismo, una parte de los habitantes de la zona
afectada trabaja en la ciudad de Córdoba, trasladándose todos los
días desde y hacia la ciudad.
Considerar
únicamente al trasporte automotor en la planificación es un
despropósito tanto ambiental como social. El mismo IPLAM ha
considerado la necesidad de implementar sistemas de trenes livianos
para el área metropolitana, incluyendo el ramal del Tren de las
Sierras, que llega hasta Villa Giardino pasando por La Calera y
Cosquín, con una renovación total, más frecuencia y velocidad
(actualmente limitado a servicios puramente turísticos).
Considerar un
servicio de transporte público de calidad, bajo control de
trabajadores y usuarios, es indispensable para un plan integral de
desarrollo para la zona de Punilla.
La participación
ciudadana
Las audiencias
públicas constituyen, hasta ahora, el único momento en el cual se
evalúa la licencia social de un proyecto. Pero, en consonancia con
la prácticamente nula importancia que se le asigna a la
participación ciudadana en las grandes decisiones, las audiencias
públicas se llevan a cabo cuando el proyecto ya está próximo a
iniciarse (cuando está todo "cocinado", usando una
expresión popular mucho más gráfica), además de no tener carácter
vinculante. Recordemos el escandaloso intento en 2016 de realizar "de
apuro" y a 170 km de la capital provincial una audiencia pública
para modificar la ley de ordenamiento territorial de los bosques
nativos.
Un proyecto no
puede definirse planteando una ruta panorámica, donde los
conductores disfrutarán de una visión privilegiada del valle
mientras circulan velozmente. Los criterios supuestamente "técnicos"
esconden siempre algún grado de subjetividad, definido en una
oficina a espaldas de la población. Los habitantes de Punilla tienen
la capacidad de elegir racionalmente entre los proyectos existentes,
sopesar sus beneficios y riesgos, e iniciar un verdadero proceso
participativo que lleve a resolver sus problemas.
Nota: El estudio
de impacto ambiental completo puede descargarse aquí.
Fuente:
Tiago Nabis, Autovía de Punilla: Cinco proyectos en el cajón, cero licencia social, 23/04/18, La Izquierda Diario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario