La pequeña localidad, con 4390 habitantes, viene sufriendo desde 2011 fuertes inundaciones. Hay cinco familias afectadas.
por Denise Vivas
El domingo 3 de enero entre las 8.15 y las 10 diluvió 150 milímetros en Isla Verde. Dejando muy afectado el barrio San José, el más humilde del pueblo. Cinco familias debieron ser evacuadas de urgencia, por tener casi un metro de agua en sus casas. El centro de la ciudad también se vio afectado, inundando las calles y cerca de 15 vecinos sufrieron pérdidas materiales. Las calles de tierra se volvieron intransitables. El cruce entre las rutas provinciales 11 y 12 se encontraba cortado por la cantidad de agua que bajaba de los campos.
El problema de las inundaciones en los pueblos del sureste del Departamento de Marcos Juárez viene de larga data. Las lluvias van aumentando año a año: En enero de 2011 llovió 53 milímetros, en 2012 fueron 128, en el 2013 baja a 43, y en los dos últimos veranos 2014 y 2015 148 y 179, respectivamente, según los registros del Servicio Metereológico Nacional.
El problema es el mismo de siempre: la distribución de los pueblos fue armada en base a las necesidades de los dueños de los campos, dejando los terrenos más bajos para el asentamiento de las poblaciones. Y cada vez que llueve, el agua cae a las localidades.
Actualmente hay un solo canal de desagüe en la zona este que no da abasto frente a las intensas lluvias.
“Estamos tratando de construir otro desagüe en la zona sureste para desagotar toda el agua, pero hay que negociar con los dueños de los campos el paso por sus tierras, y no siempre es fácil”, declaró el intendente de Isla Verde, Adrián Guzmán.
El Gobierno de la Provincia se comprometió a costear el 30 por ciento del costo de la obra, que tiene un valor aproximado de 15 millones de pesos. Desde el Ministerio de Desarrollo Social darán subsidios personales a los afectados, según las pérdidas de cada uno. En Isla Verde fueron 5 familias las que perdieron gran parte de sus pertenencias.
Las familias fueron asistidas por el municipio y la solidaridad de vecinos de localidades aledañas. Desde el domingo a la noche, dos bombas arroceras de la Dirección Provincial de Agua y Saneamiento (Dipas), trabajan para desagotar al canal norte.
Para el lunes 4, el agua ya había bajado, dejando a la vista ocho cuadras de ripio en pésimo estado. “Los desagües del pueblo no tienen capacidad para la tanta lluvia” dijo Guzmán.
Empezar de nuevo
José Carretero vive en el barrio de San José con su esposa y sus tres hijos. Con mucho esfuerzo se está haciendo su casa. “En Navidad con mi hermano cambiamos el techo que se rompió en la inundación pasada”, confió.
Carretero mantiene a toda su familia cortando el pasto de los vecinos. “Me levanté para ir a trabajar a las 7 pero vi el cielo oscuro. Para las 11 ya tenía 40 cm de agua adentro de mi casa, el agua brotaba desde el inodoro, entraba por todos lados”, relató con angustia José. Los roperos se le pudrieron, por cargar con dos inundaciones seguidas, y al caer contra el piso, rompió los cerámicos.
Los bomberos lograron sacar el agua de su casa y el lunes a la tarde pudo volver a su hogar. “Vamos a prender la estufa a leña a ver si se seca un poco todo. Todos los vecinos me llamaron para ayudarme”, se consoló José, que ya lleva dos veranos con la casa inundada y se ve obligado a empezar de nuevo, una vez más.
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Fuente:
Denise Vivas, Isla Verde otra vez inundada, 06/01/16, Día a Día Córdoba. Consultado 06/01/16.
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