El Gobierno del presidente norteamericano, Joe Biden, tiene previsto suministrar municiones con uranio empobrecido a Ucrania, un paso más de la escalada.
Por Juan Vernieri
El Gobierno de Biden enviará por primera vez municiones que contienen uranio empobrecido a Ucrania, a pesar de que dicho armamento es radiactivo y su uso puede contaminar el agua y el suelo del medioambiente circundante, lo que resulta peligroso para la salud humana.
La agencia de noticias Reuters informa que las municiones perforantes de blindaje que contienen uranio forman parte del nuevo paquete de ayuda militar para Ucrania que se dará a conocer la próxima semana.
El uranio empobrecido tiene su origen en el proceso de enriquecimiento de uranio que se usa para fabricar combustible para plantas de energía nuclear, siendo un subproducto del mismo.
Su densidad, 19 kg/l, es extremadamente alta, mucho mayor que la del plomo. Esta característica lo hace provechoso para aplicaciones militares. Se emplea en proyectiles perforantes de blindaje y también se incorpora a blindajes de carros de combate.
Tiene un efecto secundario radiactivo con un agravante: el uranio se pulveriza en la explosión, formando nubes de partículas ligeramente radiactivas que contaminan amplios territorios.
Hay otros metales con densidad desmesurada apropiados para este fin, sin embargo, se elige el uranio empobrecido para proyectiles porque tiene dos ventajas:
Su fractura en el impacto genera fragmentos afilados, que penetran mejor el blindaje.
Es pirofórico, es decir, se inflama espontáneamente al contacto con el aire por encima de los 600 °C. Así, cuando un proyectil de uranio empobrecido alcanza un blanco, no solo penetra el blindaje, sino que, además, se inflama al llegar al interior del vehículo, incinerando a la tripulación o desatando la explosión del combustible o las municiones.
En 2001, la Organización de las Naciones Unidas descubrió que la munición de uranio empobrecido estadounidense contiene plutonio porque proviene de plantas de reprocesamiento, no de enriquecimiento, por lo cual su radiactividad es más alta. Esto fue admitido por el ejército estadounidense.
Esta situación viene precedida de una decisión anterior del Gobierno de Biden de enviar a Ucrania municiones en racimo, que han sido prohibidas por un tratado internacional que fue ratificado por más de 110 países.
Un nuevo informe de la Coalición contra las Municiones en Racimo reveló esta semana que, en Ucrania, 916 personas murieron o resultaron heridas en 2022 debido al uso de bombas en racimo.
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