miércoles, 7 de agosto de 2019

Las batallas perdidas de la ciudad por el ex Batallón 141

¿Cuánto valen hoy esas tierras? Sólo el valor fiscal actual las valúan en $696 millones: siete veces más de lo que se pagó.

por Ary Garbovetzky

En la adenda al convenio urbanístico que firmaron Corporación América y la Municipalidad de Córdoba en 2017 y que cambió el destino de la inversión a favor de la ciudad por el desarrollo inmobiliario autorizado en los predios del ex Batallón 141 se estableció un plazo fatal, luego de hacer la intimación, para dar por caído el acuerdo: apenas 15 días.

Esos son los tiempos que empezaron a correr y que si llega a la caducidad advertida no hará más que llevar a una nueva instancia de discusión: la judicial. La larga novela del expredio militar está lejos de terminar.

La Municipalidad de Córdoba reclama que el grupo Eurnekian complete el pago de las obras de la primera etapa de refuncionalización de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (Edar) de Bajo Grande. Estas obras insumían 100 de los 376 millones de pesos que debía poner Corporación América. Hasta ahora, según la Municipalidad, sólo pagó 30 millones.

Desde el grupo empresario dicen que ya llevan invertida una fortuna y que las condiciones del país impiden pensar en un retorno de esa inversión ni siquiera en un mediano plazo. Y quieren volver a discutir el convenio con el intendente electo, Martín Llaryora.

Es extraño cómo la venta y luego las autorizaciones inmobiliarias para el ex Batallón 141 resultaron gigantescos beneficios a la vista de todos, salvo para Eurnekian, quien parece hacer todo lo posible para perder este tesoro urbano.

Cuando el exgobernador José Manuel de la Sota le vendió a Eurnekian las 22 hectáreas del ex Batallón 141, por 107 millones de pesos, se dijo que lo había entregado a precio de remate.

Era 2012. Luis Juez, enfrentado con De la Sota, quiso bloquear el negocio, elevando la protección del terreno de reserva militar a reserva verde.

En 2012, el intendente Ramón Mestre volvió a cambiar el uso de suelo y autorizó con un convenio urbanístico la construcción de hasta el 50 por ciento de la superficie, pasar de 10 metros a 23 metros de altura, y reservar para la ciudad apenas el 15 por ciento del predio, para un parque público. A cambio, el grupo empresario tenía que hacer obras de sistematización vial en los accesos y construir una planta de tratamiento de líquidos cloacales para la zona sud-sudeste. Mucho beneficio para el inversor, poco para la ciudad, se cuestionó.

El inicio de la obra de la nueva planta en Bajo Grande, a cargo de la Provincia y de la Nación, hizo que se pensara en cambiar el destino de la inversión para algo más urgente: reequipar la Edar, que viene contaminando el río sin cesar desde hace años.

Así se pactó la adenda, luego de cinco años de un convenio que no había registrado ningún avance y estaba en condiciones de darse por caído. El nuevo acuerdo se presentó como un pago de 376 millones de pesos, que era la actualización, a ese día, de los 97 millones de pesos calculados como “plusvalía” en 2012. Esos pagos se iban a entregar en cuotas. Incluso se difundió, por esos días, un cronograma que llegaba a abril de este año con todo pago. Pero eso no quedó escrito en la adenda, donde se estableció que el cronograma de obras y sus costos quedaban en manos de una comisión integrada por las partes y que debía remitir cada proyecto al Concejo Deliberante.

Es decir: Corporación América está siendo intimada por no pagar ni siquiera el 70 por ciento del 27 por ciento de su compromiso con la ciudad. No se le reclama por incumplir el total aunque ya goza de los beneficios, incluso sin haber edificado una sola vivienda porque el capital del grupo Eurnekian es la autorización para hacer un desarrollo inmobiliario en un predio que era una reserva y si no pone un ladrillo y vende las tierras puede igualmente hacer caja con la excepción.

¿Y cuánto valen estas tierras hoy? En el desarrollo digital de la Dirección de Rentas de la Provincia “Inmobiliario Cumplidor” la parcela de 223.242 metros cuadrados del ex-Batallón está valuada en 695.983.075 pesos. Suponiendo que ese valor fiscal se acerca al de mercado, es casi siete veces más de lo que pagó. Consuelo para el municipio, la mora de Eurnekian es un mal de muchos: también registra una deuda de 969.390 pesos con Rentas porque no pagó el Inmobiliario en lo que va del año.

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Fuente:
Ary Garbovetzky, Las batallas perdidas de la ciudad por el ex Batallón 141, 4 agosto 2019, La Voz del Interior. Consultado 7 agosto 2019.

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