Fue
en 2018, en Las Tunas. Hace 65 años que no se registraba este
fenómeno. Esperan que este año el evento se repita debido a las
condiciones climáticas.
por Lucas Viano
Caterina
Barisón espera ansiosa que llegue julio para visitar la laguna Las
Tunas, en el sudeste de la provincia. Es investigadora del Grupo de
Conservación Flamencos Altoandinos y de la Universidad Nacional de
Rosario.
Hace
un año descubrió por casualidad que los flamencos australes
(Phoenicopterus chilensis) habían decidido anidar en este espejo de
agua. Fue el primer avistamiento de nidos en Las Tunas en 65 años. Y
encontraron más de cuatro mil nidos. Cada uno es una especie de
volcán pequeño realizado con barro.
La
investigadora espera que este año el fenómeno se repita. “Sería
genial que volvieran a nidificar. Pero depende del ciclo climático y
de las lluvias. Las condiciones se han mantenido. No llovió tanto
como otros años, pero tampoco hubo una sequía. Me da esperanzas de
que hayan vuelto a nidificar”, confiesa.
La
laguna está pegada a la estancia y refugio privado de vida silvestre
Las Dos Hermanas, en el departamento Marcos Juárez. Toda la región
pertenece a la Reserva Natural Provincial Las Tunas.
El
difícil acceso al espejo de agua lo ha transformado en un paraíso
para muchas aves, algunas en riesgo de desaparecer, como el flamenco
andino (Phoenicoparrus andinus). Esta especie es la que monitorea
todos los años Barisón junto con sus colegas. Pero el año pasado
les llamo la atención la presencia de nidos del flamenco austral.
“Los
vimos de casualidad. Los alcanzamos a observar con telescopios y
luego llegamos remando al lugar”, cuenta. Habitualmente, esta
especie utiliza Las Tunas como sitio de alimentación y de descanso.
Barisón
explica que la decisión de nidificar en un lugar obedece a varias
razones: disponibilidad de alimentos; niveles de agua apropiados para
que se formen islotes y para aislar los nidos de depredadores
terrestres; baja perturbación humana, y también el tamaño de la
población.
“La
presencia de los nidos podría estar indicando la importancia que los
ciclos macroclimáticos tendrían para estas aves. La anidación
ocurrió después de tres años consecutivos de El Niño (2016-2018),
caracterizado por una alta precipitación anual que conduce a una
mayor área de superficie inundada y menor salinidad”, explica la
experta.
Y
agrega: “Este hallazgo confirma que la laguna Las Tunas es un sitio
importante para la conservación de los flamencos a escala regional”.
Barisón
asegura que, a diferencia de otros humedales de la región, la
abundancia de flamencos en esta laguna se ha incrementado durante los
últimos tres inviernos. Una razón es su nivel de conservación y
una baja en la salinidad.
El
flamenco más común
En
Argentina hay tres especies de flamencos: austral, andino y el de
James. El austral es el que está más distribuido y su situación es
estable. Se lo encuentra a lo largo y ancho del país.
A
fines de primavera, los flamencos comienzan a volar para asentarse en
los humedales seleccionados para nidificar. En el verano construyen
el nido e incuban los huevos por 29 días. Los pichones permanecen en
el lugar hasta finales del otoño o principios del invierno.
Barisón
cree que la crisis climática y otros cambios macroclimáticos
podrían estar habilitando y deshabilitando diferentes humedales para
que sean utilizados por las aves. “Una posibilidad es que algunas
especies comiencen a migrar a sitios donde antes no lo hacían,
incluso a lugares más australes”, comenta.
Y
agrega: “Por este motivo, es importante conservar una red de
humedales en un contexto de cambio climático global, el cual induce
variaciones en la ocurrencia, estructura, patrones, procesos y
funciones de los humedales”.
Una
estancia pionera en la Argentina
Es
un área protegida privada y de producción orgánica.
Estancia.
Las Dos Hermanas es una estancia de cuatro mil hectáreas, pegada a
la laguna Las Tunas. En 1919, las hermanas Rachel y Pamela Schiele
heredaron el predio. Tras leer el libro Primavera Silenciosa, de
Rachel Carson, en la década de 1960, decidieron transformar la
estancia en campo orgánico.
Refugio.
En 1989 crearon el Refugio de Vida Silvestre privado de 1.055
hectáreas. Y la estancia obtuvo certificación como productora
orgánica en 1992.
Fuente:
Lucas Viano, El Niño trajo cuatro mil nidos de flamenco a una laguna cordobesa, 14 junio 2019, La Voz del Interior.
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