Esta
localidad está amenazada por dos lagunas ubicadas al noroeste y
oeste que están saturadas. Se levantaron albardones para evitar
desbordes. El intendente González reclama la ejecución de obras.
Del
Campillo. Amenazada por dos lagunas ubicadas al noroeste y oeste en
la zona rural, los habitantes de esta localidad temen que de
cumplirse los pronósticos el agua que anega caminos y calles termine
ingresando a sus pueblos.
Después
de dos días de tregua, ayer nuevamente llovió en la localidad y los
vecinos reclamaban la agilización de tareas que realizaba la
Provincia para profundizar canales y reforzar un albardón de tierra
que impida que las lagunas vuelquen sobre el pueblo.
Con
las napas saturadas, nuevas lluvias podrían obligar a evacuar a
familias. Rodrigo González, el intendente local, admitió que la
situación es crítica y reclamó a la Provincia la ejecución de
obras que terminen finalmente con el problema de inundaciones.
Canales
clandestinos
“El
año pasado tuvimos exactamente el mismo problema de inundación,
aunque en otra época del año en la que había más sol y por lo
tanto más evaporación. En esa oportunidad vino Dipas y dijo que era
una cuestión extraordinaria. Pero ahora volvemos a sufrir lo mismo.”
Para el intendente, además de las lluvias excepcionales existe otra
causa que pone en riesgo al pueblo, cual es la existencia de canales
clandestinos por los que se derivaría agua en dirección a la
comunidad.
“Le
he pedido a gente de Policía Ambiental que investigue esta situación
porque nos está poniendo en serio riesgo”, advirtió.
Ayer,
una retroexcavadora enviada por la Provincia trabaja en reforzar
albardones de tierra para contener las lagunas y profundizar los
canales de desagües del pueblo. “Todos los trabajos apuntan a
defender la parte urbana que está seriamente amenazada. No sé
cuánto va a aguantar esa muralla de tierra que se hizo”, insistió
González.
Con
pronósticos poco alentadores que anuncian para este fin de semana la
recurrencia de lluvias de hasta 100 milímetros, en Del Campillo se
han activado todos los protocolos de prevención, para que de ocurrir
un desborde de lagunas se pueda accionar inmediatamente en el
traslado de vecinos que puedan estar en riesgo a un centro de
evacuados.
En la
localidad además hay preocupación por el impacto que esta
emergencia hídrica va a provocar en la economía local.
“Estuve
hablando con productores lecheros que me dijeron que ya no pueden
sacar la leche de los campos. Tampoco podrán levantar la cosecha,
por un lado porque no hay piso para entrar a los lotes con las
máquinas y y por otro porque tampoco quedan caminos rurales por
donde transitar”, detalló el intendente.
“Queda
esperar que el tiempo acompañe, pero además que el Gobierno de la
Provincia haga las obras que tiene que hacer. No sé qué es lo que
sucedió con los trabajos planeados en 2016 cuando tuvimos una
situación exactamente igual a ésta”.
Por
último, el mandatario de Del Campillo insistió en la necesidad de
trabajar en una planificación que permita ordenar las cuencas
hídricas. “Todo el mundo lo está reclamando. Tenemos todos los
campos inundados, tiene que haber una solución integral. No puede
ser que cada año pase lo mismo y se siga hablando de eventos
extraordinarios. Espero que se tomen cartas en el asunto y que las
obras se hagan. Acá la economía regional está muy afectada”,
sentenció Rodrigo González.
En la
región
Ayer
las lluvias volvieron al sur cordobés. En Vicuña Mackenna, unos 40
milímetros que cayeron en poco más de una hora generaron problemas
en el barrio San Vicente.
En la
zona rural de Washington hubo caída de granizo, en Huinca Renancó y
Pincen se registraron precipitaciones.
En
cuanto al estado de las rutas, se indicó que en la nacional Nº 35
seguía pasando agua a unos 5 kilómetros al sur del puente del río
Quinto, en el tramo donde se rompió la alcantarilla, y se transitaba
con precaución.
En
tanto, en la ruta 26, a la altura de Pincen, había agua sobre la
calzada.
Fuente:
Del Campillo se amuralla para evitar que el agua avance sobre el pueblo, 08/04/17, El Puntal de Río Cuarto.
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