El especialista
en medio ambiente Antonio Elio Brailovsky señaló que las recientes
inundaciones y los incendios de campos en varias provincias eran
"previsibles" y que por eso "sorprende la debilidad en
la prevención".
por Alba Silva
En diálogo con
Télam, alertó además que "no puede descartarse" que los
incendios afecten también en algún momento a zonas urbanas.
El siguiente es
el diálogo que mantuvo con esta agencia:
Télam- ¿Es
correcto decir que los incendios incontrolables y las inundaciones
son los desastres ambientales más recurrentes en el país?
Antonio Elio
Brailovsky- Efectivamente, se trata de los principales desastres de
recurrencia estacional. Por eso son previsibles. Y por eso la gestión
pública y privada tiene que tenerlos en cuenta.
T- ¿Cómo
califica a los incendios en La Pampa? ¿es un fenómeno evitable?
B- Tenemos una
alta frecuencia de incendios en la temporada seca de verano. Esto es
sabido, por lo menos desde la descripción que hizo de esos incendios
Charles Darwin ya en 1835, y sorprende la debilidad de las medidas de
prevención. Muchos incendios comienzan en la cosecha del trigo, con
máquinas que se sobrecalientan. Es frecuente la pérdida de la
cosechadora y, con ella, de la cosecha entera. Llama la atención que
muchos de esos aparatos de alta tecnología hechos por empresas
internacionales, como son las cosechadoras, no tengan ningún
mecanismo de prevención de incendios, a punto tal que el INTA
recomienda hacerles algunas reformas caseras para bajar los riesgos.
T- Los incendios
forestales son recurrentes. Uno en 1996 -época de María Julia
Alsogaray- llegó a las puertas de Bariloche ¿hubo otro caso de esa
gravedad?
B- En ese caso se
denunció la quema de bosques nativos para emprender allí proyectos
inmobiliarios. Una senadora de Río Negro piensa que muchos de los
incendios recientes de su provincia obedecen a la misma razón. Es la
misma historia de los 300 incendios intencionales que sufrió la
Reserva Ecológica Costanera Sur.
T- En abril de
2008, se produjeron focos de incendio sobre las islas del Delta del
Paraná originados en la quema de pastizales para llevar a esos
humedales el ganado desalojado por la siembra de soja. La sequía
hizo que se descontrolaran y se quemaron 70.000 hectáreas. El humo
afectó varios días una amplia zona y llegó hasta la Ciudad de
Buenos Aires y ciudades uruguayas. Las autoridades no estaban
preparadas, porque la secretaria a cargo (Romina Picolotti) había
afirmado que en abril no hay incendios rurales.
B- En cualquier
momento, como en el actual, es fácil asignar responsabilidades
personalizadas. Pero en última instancia, las responsabilidades son
institucionales. Una adecuada cultura institucional puede paliar los
errores del funcionario ocasional. Si esa cultura no existe, los
errores se potencian.
T- ¿Se puede
hablar de causas por la "mano del hombre"?
B- Son las
principales.
T- ¿Qué cree
que debiera hacerse desde el gobierno nacional en torno a este tema
(inundaciones e incendios)?
B- Se necesita
una política continuada de prevención y respuesta de emergencias.
Una sociedad resiliente es la que asocia a todos sus integrantes a
este tipo de políticas. No sólo requiere aviones hidrantes. Se
necesita que todas las personas estén alertas y realicen sus
respectivos aportes. En el caso de incendios, la detección temprana
es esencial. Finlandia tiene aviones que sobrevuelan continuamente
las zonas de riesgo para detectar los focos antes que se extiendan.
España y Chile tienen una red de torres de observación que avisan a
equipos que siempre están listos para salir.
T- En Estados
Unidos se han denunciado casos de incendios forestales iniciados por
las empresas encargados de apagarlos, para asegurarse un nuevo
contrato. Por eso sería buena idea que el equipamiento perteneciera
al sector público y no estuviera tercerizado.
B- En todas
partes hay brigadistas que pueden ser localizados y enviados con
mucha rapidez al área de siniestro. En cualquier caso, la pérdida
de vidas humanas refleja un sistema que no está funcionando
adecuadamente. Es frecuente echarle la culpa a los errores de las
víctimas, en vez de preguntarse por qué el sistema no las protegió
de esos errores. El tema inundaciones merece una muy amplia
extensión. Pero lo que podemos decir aquí es que todos los
municipios deberían definir su área de riesgo de inundación e
impedir que se construya allí. Eso lo hizo durante dos siglos el
Cabildo de Buenos Aires, en cumplimiento de las leyes coloniales. La
historia ambiental sirve para preguntarnos si aún tenemos algo que
aprender de Carlos V y Felipe II.
T- Parece ser que
los incendios tienen menor impacto en la economía en comparación
con las pérdidas por las inundaciones ¿algún comentario?
B- Hasta ahora
sí, porque estos incendios no han afectado áreas urbanas. Pero no
puede descartarse que ello ocurra.
Fuente:
Alba Silva, Brailovsky: "Darwin habló de incendios ya en 1835, por eso sorprende la debilidad en la prevención", 07/01/17, Télam. Consultado 10/01/17.
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