viernes, 21 de marzo de 2014

Los ritmos de la naturaleza y un nuevo curso presencial en la Universidad de San Andrés


por Antonio Elio Brailovsky

Hemos dicho en muchas ocasiones que quienes hacen un negocio de la destrucción de nuestro ambiente necesitan de nuestra complicidad. Si el entorno no es importante para nosotros, nadie reclamará por los daños a la Tierra a la que pertenecemos.

No es casual el que vivamos en una cultura que nos borra los ritmos de la naturaleza como si la tecnología hubiera hecho desaparecer el medio natural.


Por eso nuestra insistencia en recordar los ritmos de la naturaleza y en reforzar continuamente la educación ambiental.

En esta entrega ustedes reciben:
Un poema de Mario Benedetti, con los sentimientos que le despierta un cambio de estación en el Jardín Botánico de una ciudad que, sugestivamente, no menciona.
El anuncio de un curso de formación docente que vamos a realizar en forma presencial en la Universidad de San Andrés, bajo el lema de EDUCACIÓN PARA LA SUSTENTABILIDAD. Son seis encuentros en los que desarrollaremos diferentes facetas del proceso de construcción de una escuela sustentable, que incluye los contenidos de la enseñanza, pero que va mucho más allá, en términos de compromiso institucional.
La obra de arte que acompaña esta entrega es "Otoño", del norteamericano Frederic Edwin Church, un óleo pintado en 1875, que está en el Museo Thyssen-Bornemisza. Se trata de un artista romántico, que procura transmitir las emociones intensas que generan los paisajes que pinta. Al mismo tiempo, tuvo una formación científica rigurosa, que seguía los lineamientos de Alexander von Humboldt.

Quiero saludarlos en el comienzo del otoño.

Un gran abrazo a todos.

Antonio Elio Brailovsky

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No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes
pero el Jardín Botánico es un parque dormido
en el que uno puede sentirse árbol o prójimo
siempre y cuando se cumpla un requisito previo.
Que la ciudad exista tranquilamente lejos.
El secreto es apoyarse digamos en un tronco
y oír a través del aire que admite ruidos muertos
cómo en Millán y Reyes galopan los tranvías.
No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes
pero el Jardín Botánico siempre ha tenido
una agradable propensión a los sueños
a que los insectos suban por las piernas
y la melancolía baje por los brazos
hasta que uno cierra los puños y la atrapa.
Después de todo el secreto es mirar hacia arriba
y ver cómo las nubes se disputan las copas
y ver cómo los nidos se disputan los pájaros.
No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes
ah pero las parejas que huyen al Botánico
ya desciendan de un taxi o bajen de una nube
hablan por lo común de temas importantes
y se miran fanáticamente a los ojos
como si el amor fuera un brevísimo túnel
y ellos se contemplaran por dentro de ese amor.
Aquellos dos por ejemplo a la izquierda del roble
 (también podría llamarlo almendro o araucaria
gracias a mis lagunas sobre Pan y Linneo)
hablan y por lo visto las palabras
se quedan conmovidas a mirarlos
ya que a mí no me llegan ni siquiera los ecos.
No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes
pero es lindísimo imaginar qué dicen
sobre todo si él muerde una ramita
y ella deja un zapato sobre el césped
sobre todo si él tiene los huesos tristes
y ella quiere sonreír pero no puede.
Para mí que el muchacho está diciendo
lo que se dice a veces en el Jardín Botánico
ayer llegó el otoño
el sol de otoño
y me sentí feliz
No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes
pero el Jardín Botánico es un parque dormido
que sólo despierta con la lluvia.
Ahora la última nube a resuelto quedarse
y nos está mojando como alegres mendigos.
El secreto está en correr con precauciones
a fin de no matar ningún escarabajo
y no pisar los hongos que aprovechan
para nadar desesperadamente.
Sin prevenciones me doy vuelta y siguen
aquellos dos a la izquierda del roble
eternos y escondidos en la lluvia
diciéndose quién sabe qué silencios.
No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes
pero cuando la lluvia cae sobre el Botánico
aquí se quedan sólo los fantasmas.
Ustedes pueden irse.
Yo me quedo.

Mario Benedetti: “A la izquierda del roble”

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CICLO DE EDUCACION PARA LA SUSTENTABILIDAD

Lugar: Campus

Dirección: Vito Dumas 284, Victoria, Buenos Aires

Fechas de los Encuentros:
Martes 29 de abril, jueves 15 de mayo, martes 27 de mayo, martes 10 de junio, martes 24 de junio y jueves 10 de julio de 18:00 a 21:00 hs

Destinatarios:
Docentes, Directivos y Equipos de orientación escolar de todos los niveles educativos

Encuentros:
"Una mirada sobre la Educación Ambiental", Carlos Fernández Balboa, martes 29 de abril MÁS INFO
"La sustentabilidad: algunos enfoques de cómo abordarla", Antonio Elio Brailovsky, jueves 15 de mayo MÁS INFO
"¿Cómo concebimos una escuela sustentable?", Damasia Elena Ezcurra, martes 27 de mayo MÁS INFO
"Ecoauditorías. Una herramienta didáctica para los proyectos ambientales", Hilda Weissmann, martes 10 de junio MÁS INFO
"Las miradas del agua en la escuela", Damián Indij, martes 24 de junio MÁS INFO
"Elaboración de proyectos educativos ambientales. Planificación y evaluación", Elizabeth Gothelf,jueves 10 de julio MÁS INFO

Arancel Ciclo de Educación para la Sustentabilidad: Ciclo completo de 6 encuentros: $900

Vacantes limitadas: Inscripción online hasta 48 hs hábiles previas al inicio del primer encuentro ingresando a www.udesa.edu.ar/educacion

Consulte: Régimen de becas y descuentos por teléfono al 4725-7030 de 9:00 a 13:00 hs o por mail a educacionsustentable@udesa.edu.ar

Fuente:
Antonio Elio Brailovsky, Los ritmos de la naturaleza y un nuevo curso presencial en la Universidad de San Andrés, 21/03/14, Defensoría Ecológica.

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