Wircaleo
es una comunidad mapuche en Sauzal Bonito, Neuquén, que sufre los
sismos desde la llegada del fracking, aseguran. Reclaman el cese de
la actividad: “Si se van, muchas personas se quedarían sin laburo.
Tendrían que invertir en energías renovables”, explica su longko.
por
Sabrina Pozzi
“Un
día vino mi nietito de dos años y se cayó ese pedazo de techo al
piso. Si se le caía en la cabeza no sé… Mirá cómo quedó esta
parte, está toda dañada”, explica Jobita, integrante del Lof
(comunidad) mapuche Wircaleo, entre sollozos. “Tengo once nietos
que cada tanto me vienen a visitar. Ellos viven en Cutral Có y
Buenos Aires. Tengo miedo de que pase cuando estén ellos. Cuando
llegan los temblores, se mueve todo”.
Wircaleo
es una comunidad mapuche ubicada en Sauzal Bonito, a una hora de
Añelo, Neuquén. Desde la llegada del fracking, denuncian, junto con
los habitantes del pueblo, la llegada de “sismos” que provocan
roturas, daños en las viviendas y es un peligro para su vida.
“Se
escucha y se siente como una explosión. Tan rápido que parece un
piedrazo fuerte contra la pared, explota y arranca. Hay ruido y se
mueve todo”, cuenta la comunidad. “Es horrible”, señala Elda,
la madre del longko. “Mire mi casa, no es necesario hablar. Los
nenes lloran, se ponen nerviosos. Todos disparamos para afuera apenas
comienzan”.
A
pesar de la negación por parte del gobierno neuquino sobre su
relación con el extractivismo, gracias a la resistencia del pueblo
el año pasado lanzaron un programa provincial que incluye la
instalación de 20 equipos para clarificar el origen de los sismos en
Vaca Muerta. Hasta ahora se instalaron dos, uno en Sauzal Bonito y
otro en Añelo. “El año pasado dieron una charla por lo de los
sismógrafos en Sauzal Bonito y dijeron que los sismos se iban a ir
en 20 años”, señala Ana, miembro del Lof.
Eduardo
es el longko (jefe) de la comunidad. “La provincia nos trajo hace
dos años estos testigos, le llaman, que son un comprobante para
ellos para identificar la magnitud de los sismos. Algunos se rajaron
y otros directamente se cayeron. Para la provincia, son sismos
naturales por desniveles del suelo. Pero no es posible que haya 3 o 4
por mes. Antes no ocurrían. Además, coincide en que suceden cuando
las máquinas perforan acá a unos kilómetros. Cuando se retiran,
los sismos cesan”.
“A
nosotros no nos pueden engañar”, aseguran en la comunidad. Varios
de ellos trabajaron en el petróleo. Serafín afirma: “Yo me echo
la culpa porque trabajé en el petróleo y también contaminé”.
Alejandro,
por su parte, aclara: “Las fracturas las conocemos. Cuando se hace
la fractura ahí comienza el sismo, antes no hay movimiento”. “Los
sismos cesaron cuando se retiraron las torres”, explica el longko.
Y concluye: “Cada torre tiene un control permanente de lo que se
hace y se va a hacer en los pozos. Queda registrado. ¿Pero quién
investiga o da autorización a que se haga? Eso no lo van a hacer”.
“Antes
acá había mucha fauna y ahora es raro que te encuentres con un
animal. Con los temblores se fueron”, explica Norma Romero, werkén
(vocera) del Lof.
La
contaminación es otra de las consecuencias del fracking. “El agua
de Añelo es una de las más contaminadas”. La comunidad potabiliza
el agua que consume de pozo. Sin embargo, dicen que sale “rara”,
“distinta” desde que comenzaron las perforaciones.
El
lof mapuche Wircaleo, al igual que las demás, poseen la personería
jurídica, pero no el título de propiedad de la tierra. El longko
explica: “Eso es algo que lo retrasa provincia y tendría que estar
justificado por los años que vivimos. Es algo que cuesta. Provincia
siempre quiere mantener el poder porque teniendo un título nosotros
tenemos más cercano nuestro petitorio. Pero, en realidad, sería
mucho más fácil para nosotros”.
El
reclamo de la comunidad es contundente. “Pedimos el cese de la
actividad. Vivir con estos problemas no es seguro. O buscar otras
formas de hacerlo que no sea contaminante”. Y añade el longko: “Si
se van, muchas personas se quedarían sin laburo. Tendrían que
invertir en energías renovables, pero no lo hacen”.
Sabrina Pozzi es periodista | Fellow of Climate Tracker | @sabrinapozzi
Fuente:
Sabrina Pozzi, Sismos en Vaca Muerta: “Tengo miedo de que a mis nietos les pase algo”, 23 marzo 2020, La Izquierda Diario.
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