sábado, 30 de marzo de 2019

El Centro Mandela advierte que se sacrificarían más de 220 mil hectáreas de bosques protegidos

En una presentación realizada en la Reserva Natural Los Chaguares de Colonia Benítez, el coordinador del Centro Mandela, Rolando Núñez, advirtió sobre la hipótesis de que con la nueva ley de Ordenamiento Territorial se pretenden convertir en zona Verde entre 220 mil y 409 mil hectáreas para legalizar los desmontes realizados en zonas prohibidas y para la siembra de transgénicos.

El sábado 23 de marzo el Dr. Rolando Núñez, coordinador del Centro Mandela, disertó en la jornada sobre “Actualidad de los desmontes en la provincia de Chaco”, organizada por la Reserva Natural Los Chaguares, en Colonia Benitez. En el panel introductorio estuvieron presentes Javier Cardeli, titular de la Reserva y organizador del evento, y Humberto Martínez, ingeniero técnico del proyecto.

Núñez hizo un recorrido histórico sobre el avance de los desmontes y el modelo de agricultura industrial en Argentina. Describió el desplazamiento de la población rural -pequeños productores, minifundistas y comunidades indígenas- hacia el norte de El Impenetrable o hacia los centros urbanos.

Entre las empresas que manejan la agro exportación hay ocho grandes jugadores. Esos jugadores no viven en el sistema democrático, no les interesa la salud, la educación. Lo que les pasa por la cabeza es que lo único que sobra son los argentinos viviendo en las tierras argentinas”, puntualizó Núñez y agregó que, de esta manera, se consolidó un proceso de urbanización para captar a las familias rurales y sacar a la gente del monte.

El expositor señaló que el proceso de instalación del modelo de producción de agricultura industrial en Argentina comenzó en la última etapa de la dictadura militar y se terminó de cerrar durante el gobierno del presidente Menem. Para esto, además de orquestar una fuerte campaña propagandística a través de los medios masivos de comunicación, se intervinieron las universidades públicas y se diseñaron las privadas estableciendo el concepto de lo que tenía que producir Argentina.

Inventario forestal

En el caso de la provincia de Chaco, el Coordinador del Centro Mandela recordó que en el año 1907 el 84 % del territorio tenía monte. El inventario forestal que se realizó en 2005, bajo la dirección del ingeniero Enrique Wabo, dio un “saldo” de monte de 4.999.000 hectáreas. Sin embargo, Núñez señaló que es un inventario ficticio, fraudulento, ya que en ese momento no había un territorio con monte que superara las 3.450.000 hectáreas. Los números fueron elevados para continuar con el desmonte.

El inventario del 2011, aunque entre el 2005 y el 2011 se tumbaron miles de hectáreas de monte, arrojó el mismo resultado de 4.999.000 de hectáreas. “Estamos sin inventario forestal, esa es la verdad. Creo que un reclamo fuerte, concreto, a la administración del gobernador Domingo Peppo tiene que ser (contar con) un inventario forestal”, afirmó Núñez.

Actualidad del desmonte en Chaco

Por otra parte, Núñez se refirió a la actualidad del proceso de desmonte: “Ahora la situación se agravó. Estaban preparando el proceso de actualización del Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos (OTBN) de la Ley de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativos (26.331) a través del decreto 233/17 firmado por el gobernador Peppo y, despacito, empezaron las actuaciones administrativas. En noviembre del año pasado empezaron algunas comunicaciones de que se estaba trabajando la actualización del OTBN”.

La investigación del Centro Mandela comenzó al recibir el dato, suministrado por una fuente estratégica en Buenos Aires, de que se debían preservar unas 200 mil hectáreas de Zona Protegida (Zona Amarilla, Categoría II). Entonces, observaron la zona más atacada desde abril de 2018, al norte de Pampa del Infierno y, fundamentalmente, de Los Frentones y Río Muerto. Esta franja limita con Santiago del Estero y está al oeste de la colonia de Castelli, casi totalmente desmontada.

Núñez explicó: “Queda una U en zona amarilla, arriba de Los Frentones. Hicimos un cálculo de 220 mil hectáreas en la zona más atacada, donde van a ver mayor cantidad de desmontes en zona protegida, con procedimientos tramposos que iniciaron empresarios muy fuertes en la Subsecretaria de Recursos Naturales.

Consiguieron que esos predios ubicados en zona amarilla, que habían comprado recientemente, fueran recategorizados y se les autorizara a hacer agricultura. Muchos sojeros cordobeses compraron al 30 % del valor de los campos en zona verde (Categoría I, que permite el desmonte). Quiere decir que tenían el dato de que iban a conseguir la recategorización, iban a autorizarse los desmontes y que podían habilitar chacra inmediatamente porque no son filántropos para comprar campos en zona amarilla y proteger el monte”.

Y agregó: “Lo que están pidiendo los grandes empresarios, los grandes inversores, es seguridad jurídica después del procedimiento tramposo para recategorizar y para desmontar: que se convierta en zona verde”.

Posteriormente, el coordinador del Centro Mandela continuó exponiendo sobre las hipótesis de investigación que vienen trabajando: “La primera hipótesis es de 220 mil hectáreas, y llegamos a la sexta, que comprende 409 mil hectáreas. Una vez que consolidamos la información, nos reunimos con los Ministros y con los Secretarios de Estado y les dijimos: ‘Este es el paquete atado con el cual quieren llevar adelante la actualización del OTBN. Van a sacrificar de 220 a 409 mil hectáreas de zona protegida para que avance la agricultura transgénica’. Las preguntas que hicimos fueron: ‘¿Conocen la existencia de este paquete cerrado? ¿Pueden contestar o no?’. Ninguno contestó”.

Freno al desmonte

Núñez recalcó el camino que está realizando para exigir el freno inmediato al desmonte en la provincia: “La propuesta nuestra es que se anule todo el procedimiento de actualización del OTBN, que se anulen todas las disposiciones dictadas por la Subsecretaria de Recursos Naturales autorizando las recategorizaciones de predios en zonas protegidas, y que se anulen todos los permisos de desmonte. Por otro lado, trabajar en terreno. Si hay cultivo, permitir que levanten en el momento oportuno y luego clausurar la chacra imponiendo la infracción, el pago de multa y un proceso de reforestación que reponga, en el tiempo que sea, lo desmontado con cargo o costo para el empresario, para lo cual hay que cautelar el campo para que no lo vendan. Y, por último, la investigación administrativa y penal de los funcionarios públicos”.

Se refirió, a su vez, al movimiento Somos Monte Chaco, que reúne a organizaciones y personas preocupadas por la situación del desmonte en la provincia, como un espacio en crecimiento necesario para dar batalla en la actual coyuntura. “Cuando uno se agrupa tiene posibilidades de escuchar mejores ideas, propuestas, avances. Es importantísimo que siga”, comentó Núñez.

Por último, hubo un espacio para que Marcelo Carou, presidente de la Asociación Civil de Turismo Receptivo de Chaco, explicara la oposición de los prestadores locales de servicios de turismo y organizaciones de la sociedad civil a la instalación de un camping de alta gama glamping dentro del Parque Nacional El Impenetrable, violando el artículo 6 de la ley de Parques Nacionales (22.351). Este caso, que también afecta la protección de los montes y las posibilidades de desarrollo económico con emprendimientos sustentables para pobladores de la zona, ya fue denunciado por el Centro Mandela.

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