sábado, 27 de octubre de 2018

Sin destruir el bosque nativo, se puede duplicar el flujo económico y el empleo, y evitar inundaciones

Proponen un plan para mantener a perpetuidad el Corredor del Caldén, donde hay 180 especies autóctonas por preservar. Son 75 mil hectáreas de máximo valor de conservación, en las que está en riesgo una rica variedad de flora y fauna.

Investigadores locales aseguran que, sin destruir el bosque nativo, en la zona de los caldenes del sur provincial es posible duplicar el flujo económico, disminuir hasta en un 50 por ciento las pérdidas de agua por escorrentía -que circula sobre el terreno- y duplicar o triplicar la generación de empleo.

Esto surge de un estudio que desarrollan en un área de 665 mil hectáreas, en el suroeste de Córdoba, que conforman el denominado Corredor Biogeográfico del Caldén, de las cuales 75 mil están ocupadas por bosques nativos, cuya propiedad es en un 96 por ciento de empresarios con más 500 hectáreas y en un 4 por ciento de pequeños productores familiares.

En estos bosques del sur provincial, docentes de la Universidad Nacional de Río Cuarto están llevando adelante relevamientos y formulando proyectos para el uso y conservación de esos espacios.

Existe un potencial de desarrollo y una amplia posibilidad de alinear las expectativas de los agricultores y la comunidad en el Corredor Biogeográfico del Caldén a través de un plan territorial rural con visiones consensuadas, aunque requieren una mayor responsabilidad empresarial y un desempeño político institucional proactivo más exigente, que involucre a la comunidad local e incorpore la innovación productiva integrada a las políticas ambientales en una visión que induzca y motive su adopción por parte de los productores empresariales y familiares”, afirmó el ingeniero José Plevich, docente de Dasonomía y Ecofisiología de la Producción Vegetal de la Facultad de Agronomía y Veterinaria.

Planificación a futuro

Hay cuatro posibilidades a futuro. Una es seguir con lo que se está haciendo. Otra es la herbivoría, que se hace en los bosques, y que es ingresar con ganado para recolectar el pasto. Otra es mejorar la eficiencia con la que se recolecta el pasto y conservar el bosque. Y la otra es, además de esa herbivoría con buen manejo, aplicar tecnologías para manejar las leñosas, es decir, los árboles y los arbustos, a través de la silvicultura”, explicó Plevich. Y acotó: “Trabajamos con indicadores económicos, sociales y ambientales. Y jerarquizamos tres: los ingresos, el nivel de empleo que se podría mejorar, y la disminución de la escorrentía y su impacto en cuanto a las inundaciones, como un factor ambiental”.

El planteo nuestro es trabajar con una visión de futuro, a unos 20 años. Hemos diseñado un esquema que está centrado en una tipificación de productores, tenedores de bosques, que son los empresarios que tienen más de 500 hectáreas, y los pequeños productores”, indicó Plevich, al tiempo que remarcó: “El 96 por ciento está en manos de los empresarios y sólo el 4 por ciento es de los pequeños productores”.

El investigador dijo: “Se han planteado modelos alternativos para que sean analizados por el Estado y los productores”. “Ahora estamos en el proceso de lograr que se reúnan las partes para determinar la visión de futuro a seguir”.

El catedrático acaba de participar, en representación de la UNRC, de un encuentro que se realizó en Buenos Aires, con miras a la implementación del plan de acción nacional de bosque y cambio climático, cuyo eje central es la comprensión del estado de situación actual de los bosques nativos del país y el esbozo de un escenario de cara al año 2030, con la mira puesta en las bajas emisiones. Allí estuvieron las provincias de la ecorregión monte y espinal -Entre Ríos, Santa Fe, Córdoba, San Luis, La Pampa, Buenos Aires, Catamarca, La Rioja, San Juan y Mendoza-, las cuales buscan profundizar las medidas de mitigación de daños en relación con los bosques y el cambio climático.

En este ecosistema cordobés trabajan investigadores de las áreas de Dasonomía, del Departamento de Producción Vegetal; Planeamiento Agropecuario, de Economía Agraria; Botánica Sistemática, de Biología Agrícola; y Sistemas suelo y Manejo de uso de los suelos, de Ecología Agraria.

Los universitarios avanzan a nivel local, específicamente en los bosques de caldén del sur de Córdoba, en la delineación de un plan del territorio rural y su valoración empírica. Diseñaron un menú de visiones para permitir a los productores guiar la planificación predial. El modelo está desglosado a nivel de productor representativo empresario y familiar, e integra cuatro visiones de largo plazo, trazadas para el componente agrario.

El diseño integra e incorpora las políticas ambientales nacionales y provinciales junto con innovaciones productivas. Y sus resultados son promisorios, tanto para los agricultores como para la conservación del Corredor Biogeográfico de Caldén.

Un bosque rico: hay 180 especies autóctonas por conservar

En el bosque de caldén crecen unas 180 especies distribuidas en 46 familias; las más importantes son las Asteráceas (32 especies), Gramíneas o Poáceas (46 especies) y Solanáceas (18 especies), entre otras. Allí, hay 17 especies endémicas, 59 plantas medicinales y 8 plantas tóxicas.

El desmonte para establecer sistemas agrícolas y ganaderos ha constituido y constituye procesos de ruptura del hábitat en la región, que implican la reducción del área boscosa original, la redistribución de los parches remanentes y el aumento de los efectos de borde con la matriz, originando condiciones diferentes a las del bosque original y trayendo como consecuencia la invasión de malezas.

Defensa del medio ambiente

El estado de situación actual de los bosques nativos es tema de estudio de distintos grupos de trabajo de la Universidad.

En el marco del debate del anteproyecto de ley de Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos y Regulación de Bosques Exóticos de la Provincia de Córdoba, especialistas de la UNRC describieron la deteriorada situación de los bosques serranos, los caldenes del sur y los algarrobos del centro, afectados por los desmontes y los procesos de avería provocados por la agricultura y la ganadería.

La Comisión Técnica de Bosques Nativos de Córdoba, conformada por el Rectorado e integrada por representantes de las cinco facultades, de la cual formó parte el ingeniero José Plevich, advirtió que los bosques en el sur de Córdoba se encuentran en pleno retroceso debido al avance de la agricultura, la urbanización, las quemas reiteradas y el manejo inadecuado de los bosques que aún quedan en pie, y que las consecuencias ambientales de su disminución serían irreversibles y su reducción repercutiría profundamente en el desarrollo social y económico regional.

Se puntualizó que “la desaparición de los bosques en Argentina acelera el cambio climático generando un clima más desfavorable, que altera la producción agrícola, empeora el acceso al agua potable o exacerba los climas extremos, repercutiendo en la economía y el bienestar de sus habitantes”.

Entonces, la Universidad pidió ampliar las posibilidades de participación de los actores locales e interesados en la conservación del bosque, que permitan enriquecer el proceso de actualización del ordenamiento territorial de los bosques nativos, de acuerdo con las masas boscosas de la provincia.

Sobre los bosques, se describió que “entre los años 2012 al 2015 se desmontaron alrededor de 23.884,50 hectáreas, mientras que en 2016 se desmontaron 1.300 hectáreas, principalmente en la zona norte-oeste de la provincia” y que “todos los casos correspondieron a desmontes totalmente ilegales”.

También, los especialistas señalaron la complicada situación de los bosques de llanura, con neto dominio de algarrobos, que ha sido una zona de las más afectadas por la agricultura. Y expresaron que los bosques de caldén están al borde de su desaparición en la provincia de Córdoba.

Buscan adecuar los posibles usos de los bosques

A nivel estatal se procura la adecuación de los usos posibles de los bosques en el territorio, de acuerdo con sus características, potencialidades y riesgos de deterioro. Para ello se realizó un encuentro de diálogo multisectorial para la implementación del Plan nacional de bosques y cambio climático, organizado por la Secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, del cual tomó parte el magister en Ciencias Forestales José Plevich, quien sostuvo que “en Córdoba hay cuatro millones de hectáreas de bosque nativo”.

Los ejes estratégicos seleccionados para la provincia de Córdoba fueron el ordenamiento territorial y el uso y manejo sostenible de los bosques. Respecto al ordenamiento territorial se reconoció la falta de actualización en el ordenamiento territorial de bosques, de participación de todos los actores sociales interesados en la conservación y usos sostenibles del bosque y de articulación entre Provincia y municipios”, indicó el investigador. Y agregó: “En cuanto al uso sostenible del bosque se reconoció la necesidad de establecer post zonificación y ordenamiento de los mismos, diagnósticos sobre bienes y servicios ecosistémicos que pueden ofrecer y la formulación de modelos alternativos de uso y manejo sostenibles, que permitan mantenerlos o incrementarlos a perpetuidad”.

En el encuentro se discutieron los ejes operativos, las acciones y actividades prioritarias y la identificación de aspectos clave en la implementación del plan, así como también sobre los riesgos y beneficios sociales y ambientales.

Todo apunta a reducir las emisiones y el aumento de la captura de gases de efecto invernadero del sector forestal, a través del fortalecimiento de la gestión sostenible de los bosques nativos, de manera de reducir su vulnerabilidad frente al cambio climático.

Esto está en línea con los compromisos asumidos por Argentina ante la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, en el marco del Acuerdo de París.

Sobre este encuentro, Plevich dijo: “En lo que se refiere a los bosques, las medidas de mitigación que se plantean desde este Plan y que fortalecen también la adaptación al cambio climático, se basan en la conservación de los bosques, el aprovechamiento forestal sostenible y el manejo del bosque con ganadería (silvopastoril), a la vez que evitar la deforestación y realizar prevención de incendios forestales”.

A partir de 2013, la Provincia accedió al Fondo Nacional para el enriquecimiento y la conservación de los bosques nativos de manera excepcional, asumiendo compromisos de mejora del proceso de Ordenamiento Territorial de Bosque Nativo.

Fuente:
Deolinda Abate Daga, Sin destruir el bosque nativo, se puede duplicar el flujo económico y el empleo, y evitar inundaciones, 25/10/18, El Puntal de Río Cuarto. Consultado 27/10/18.

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