Por la superficie
anegada, los expertos calculan en ese monto el impacto en el cultivo
de soja; en Santa Fe estiman que hay casi cuatro millones de
hectáreas afectadas.
por Fernando Bertello
La campaña
agrícola en la Argentina ya tiene un piso de pérdidas de entre 1100
y 1750 millones de dólares, según previsiones oficiales y privadas,
por el efecto de las inundaciones que golpean gran parte del
centro-sur de Santa Fe y zonas del norte y oeste de Buenos Aires y
Córdoba.
Por las fuertes
precipitaciones anteriores, la semana pasada ya había quedado en
duda el logro de una cosecha récord. Las lluvias del fin de semana
pasado agravaron el panorama, ya que en amplias regiones superaron
los 200 milímetros.
Las inundaciones
están haciendo barajar de nuevo los cálculos de cosecha. Pablo
Adreani, de la consultora AgriPac, pasó de prever 55 millones de
toneladas de soja al inicio de la campaña a 50 millones de
toneladas. Esos cinco millones de toneladas menos significan US$ 1750
millones, aproximadamente el 7% del valor de la cosecha. Adreani
sostiene que hay un millón de hectáreas sin sembrar con el cultivo:
300.000 por la sequía en el sur bonaerense y 700.000 por
inundaciones. Además, hay otras 700.000 hectáreas anegadas, ya
sembradas.
En Rafaela, por
ejemplo en plena cuenca tambera de Santa Fe, entre el 15 de diciembre
y anteayer cayeron 429,2 milímetros, el mayor registro para ese
período de los últimos 55 años y casi cuatro veces más de lo que
llovió en igual fecha del año pasado. En Venado Tuerto, en tanto,
en el sur provincial, según el INTA entre el 15 de diciembre pasado
y anteayer llovieron 429 milímetros, el valor más alto para esa
fecha en los últimos 27 años.
Además, se
destacaron los 315 mm en Pueblo Esther, caídos entre las 7 y las 17
de ayer, 250 mm en Wheelwright, 160 a 240 mm en Elortondo, 170 mm en
Santa Isabel, 128 mm en Santa Teresa y 200/220 mm en Hughes, en la
provincia de Santa Fe. En la localidad bonaerense de La Emilia,
próxima a San Nicolás, las lluvias llegaron al casco urbano y
provocaron evacuaciones y daños en propiedades.
Hay lugares de la
zona agrícola central donde ya llovieron 600 milímetros en el
último mes, más del 60% del registro de todo un año.
"En la zona
hay registros de lluvias desde 1913. Nunca se dio que en un día
lluevan de 200 a 200 milímetros como hoy [por anteayer]", contó
Alberto Marchionni, productor de la localidad santafecina de Hughes.
Para el
especialista en agroclimatología Eduardo Sierra, "estadísticamente
estos eventos de precipitaciones intensas se producen en promedio
cada 15 años y últimamente sus efectos se han visto magnificados
por la acción humana que los exacerba". Explicó que el factor
que los dispara son los episodios de "Super El Niño, que se
producen cada 15 años, causando inundaciones que se prolongan
durante los 3 a 4 años posteriores". El país viene del "Súper
El Niño" en 2015/2016.
En medio de este
panorama, según la Oficina de Riesgo Agropecuario (ORA) del
Ministerio de Agroindustria no habría lluvias por los próximos
siete días en las zonas inundadas, lo cual significa un breve
respiro para los productores.
"Hay sojas
inundadas y pérdidas y lotes amarillentos por asfixia que van a
rendir menos", señaló Rodolfo Rossi, presidente de la
Asociación de la Cadena de la Soja (Acsoja). La semana pasada, el
Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), calculó en
57 millones de toneladas la cosecha de soja argentina. Pero para
Rossi por el efecto del agua ese número es un techo y en realidad la
cosecha puede ser "para abajo".
En octubre
pasado, durante un seminario, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires
había proyectado para soja una producción de 53 millones de
toneladas. "Si había chances de tener una mayor producción
respecto de lo que publicamos en octubre, es probable que se hayan
perdido luego de las lluvias del pasado fin de semana y de las
anteriores. Es un cúmulo de lluvias que complicó gran parte del
centro de la región agrícola, a lo que se suma la sequía en el sur
de Buenos Aires", dijo Esteban Copati, analista de la Bolsa de
Cereales porteña.
Desde la Bolsa de
Comercio de Rosario, Marina Barletta señaló que restan sembrar un
millón de hectáreas con soja y hay 500.000 hectáreas que están
comprometidas entre excesos de agua y déficit hídrico. Sin embargo,
cree que no todo está perdido. "Si bien hay lotes perdidos por
anegamiento, los productores esperarán hasta fin de mes para sembrar
soja. Si las aguas bajan y el piso lo permite se terminarán de
sembrar las hectáreas que faltan", explicó.
Por su parte,
ayer el gobierno de Santa Fe estimó en cuatro millones las hectáreas
afectadas por las inundaciones en esa provincia y calculó en US$
1100 millones las pérdidas. "Sobre siete millones [de
hectáreas] de área agrícola cultivada, cuatro millones se
encuentran afectadas; de las cuales preliminarmente 1,5 millón está
en forma crítica", indicó. Además, estimó que en la región
hay 1350 tambos afectados.
Cruce de
reproches entre la Nación y el gobierno de Santa Fe
Lifschitz reclamó
"ayuda urgente", pero desde la Casa Rosada lo
responsabilizaron por las pérdidas.
por Jaime Rosemberg
El contexto para
los chispazos no es, precisamente, el mejor, con varias localidades
anegadas y la certeza de cuantiosas pérdidas. Pero lo cierto es que
funcionarios del gobierno nacional y de la provincia de Santa Fe
discreparon ayer, en público y en privado, sobre las causas y
consecuencias del temporal que provocó situaciones desesperantes
como la de Arroyo Seco, cercana a Rosario, la capital provincial que
el socialismo maneja desde 1995.
Las discrepancias
comenzaron a sentirse por la mañana, cuando funcionarios del
gobierno santafecino empezaron a reclamar ayuda del Gobierno para
paliar los efectos de las inéditas lluvias en setenta localidades
santafecinas. "La situación que ofrece la producción agrícola
y tambera en Santa Fe va a necesitar del gobierno federal y de
decisiones urgentísimas", expresó el ministro de Producción
de Lifschitz , Luis Contingiani, en declaraciones radiales.
El Gobierno, que
ya tenía programada para la tarde una visita a la zona encabezada
por el ministro de Agricultura, Ricardo Buryaille, y el secretario de
Interior, Sebastián de Luca, dejó trascender su incomodidad antes
del encuentro con el gobernador, con la vista puesta en las zonas
afectadas. "Pedimos hace un año un informe hídrico a Córdoba
y Santa Fe. Córdoba nos lo envió enseguida. Gobiernan hace nueve
años la provincia y más de veinte Rosario, se hizo poco y nada en
materia de prevención", puntualizaron altas fuentes del
Gobierno antes del viaje de la delegación a Santa Fe para
encontrarse con Lifschitz. De todos modos, en la Casa Rosada hacían
hincapié en las administraciones de Hermes Binner y Antonio Bonfatti
más que en el actual gobernador. "Fueron ellos los que fallaron
en esta materia", aclararon fuentes oficiales.
Desde el gobierno
santafecino contraatacaban con dureza. "La gente está muy
caliente y esto no se arregla con créditos blandos de Nación.
Muchos productores están arruinados", fue el argumento de
Lifschitz, dentro y fuera de la reunión en la que se desarrolló el
cónclave. El propio gobernador culpó a Córdoba, que según su
visión "nos tiran el agua y no tenemos capacidad para
evacuarla".
Según asistentes
a esa reunión de autoridades, que comenzó pasadas las 18.30 y se
extendió por varias horas, varios productores hablaron de "abandono
provincial en obras hídricas", culpando a las administraciones
socialistas anteriores por las consecuencias del diluvio que azotó a
Santa Fe en las últimas tres semanas. Buryaille anunció ayer la
convocatoria para la Comisión Nacional de Emergencias y Desastres
Agropecuarios a fin de analizar el impacto de las inundaciones y
otros desastres naturales ocurridos en el país
El gobierno de
Mauricio Macri y el de Santa Fe mantienen una relación tirante. Al
inicio de su gestión el Presidente tildó al socialista del "más
opositor a nuestra gestión" para luego encontrar una tregua. El
temporal amenaza con destruir los puentes construidos entre ambos.
Cambiemos ya alista al diputado Luciano Laspina para competir contra
el PS en las legislativas.
Sergio Bergman,
sobre las inundaciones: "El Gobierno articula todos los recursos
para enfrentar el drama"
No obstante, el
ministro de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación
admitió que hay que estar preparados para un año complicado.
El ministro de
Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable, Sergio Bergman, aseguró
que el gobierno nacional se encuentra "respondiendo con fuerza a
la contingencia" de inundaciones, incendios y situaciones de
desprendimientos de tierra en distintas zonas del país, "con
todos los recursos disponibles para enfrentar el drama y ayudar a los
que los padecen".
El ministro
admitió que no obstante "hay que estar preparados para un año
complicado" por efectos del cambio climático, que genera "un
situación terrible", y destacó que "es muy doloroso tener
víctimas fatales en Jujuy y las inundaciones que son una tragedia
para tantos argentinos".
"Es muy
doloroso afrontar víctimas fatales en Jujuy, familias que perdieron
sus casas, igual que con las inundaciones que realmente son una una
tragedia para tantos argentinos. Hay que pensar en el cambio
climático y relacionarlo con la vulnerabilidad de estos lugares",
dijo Bergman.
El ministro
destacó la convocatoria y constitución en los lugares más críticos
del Comité de Crisis, que realizó el jefe de Gabinete nacional
Marcos Peña, y sostuvo que "el gobierno está concentrando
todos los recursos disponibles para enfrentar el drama y ayudar a los
que lo padecen, con el Ministerio del Interior y el de Agroindustria
en el lugar".
"Estamos
respondiendo con fuerza a la contingencia y previendo que vamos a
tener un verano muy complicado en varios frentes y diferentes
regiones", agregó, aludiendo a las inundaciones en el norte y
la sequía e incendios forestales y de campos en el sur.
Señaló que el
gobierno nacional busca la "articulación de todos los recursos
disponibles" y advirtió que "a veces con la naturaleza uno
no puede manejarse como quisiera. Hay que actuar con prudencia y
responsabilidad, sabiendo que no todo se puede atender y revertir".
El ministro de
Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación llegó a
Bariloche para inaugurar el mayor centro de manejo de incendios
forestales de la Patagonia, en el que la Nación y Río Negro
invirtieron más de 80 millones de pesos, y que funcionará como sede
en la ciudad del Servicio Provincial de Lucha contra Incendios
Forestales.
Agencia Télam
Fuentes:
Fernando Bertello, Inundaciones: pronostican pérdidas para el campo de hasta US$ 1750 millones, 17/01/17, La Nación. Consultado 17/01/17.
Jaime Rosemberg, Cruce de reproches entre la Nación y el gobierno de Santa Fe, 17/01/17, La Nación. Consultado 17/01/17.
Sergio Bergman, sobre las inundaciones: "El Gobierno articula todos los recursos para enfrentar el drama", 17/01/17, La Nación. Consultado 17/01/17.
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