Macri anunció la
medida en su primera conferencia de prensa del año; beneficiará a
productores de Buenos Aires, Santa Fe, La Pampa y Río Negro; dijo
además que ya envió un comité de crisis para ayudar a los
damnificados.
por Santiago Dapelo
El Gobierno sigue
con atención la dramática situación que atraviesa parte del país
por las inundaciones y los incendios, con sus consecuentes pérdidas
millonarias, y se prepara para declarar mañana la emergencia
agropecuaria en cuatro provincias: Buenos Aires, Santa Fe, La Pampa y
Río Negro. La medida se extenderá por seis meses.
Así lo decidió
el presidente Mauricio Macri después de analizar el estado de
situación junto a sus ministros en la primera reunión de gabinete
del año. Los productores que sufrieron daños en sus cultivos y
producciones podrán prorrogar el pago de los impuestos nacionales,
no tendrán vencimientos en los préstamos que les haya otorgado el
Banco Nación hasta el final de la emergencia y se otorgarán
créditos con tasa subsidiada. También se prevé la creación de un
fondo para los productores que no estén bancarizados y líneas de
créditos con una tasa especial.
"Vamos a
declarar la emergencia", dijo ayer el jefe del Estado en
conferencia de prensa ante la pregunta de La Nación. "Claramente
estamos para asistir con todas las herramientas que tengamos",
agregó Macri.
Aunque el
Presidente evitó hablar de cifras, la campaña agrícola podría
tener pérdidas de entre 1100 y 1750 millones de dólares, según
previsiones oficiales y privadas, por el efecto de las inundaciones
que golpean gran parte del centro-sur de Santa Fe, y zonas del norte
y oeste de Buenos Aires y Córdoba.
"No nos
queremos apresurar a decir cuál va a ser la pérdida porque no hay
un relevamiento certero de cuáles están anegadas, cuáles están
inundadas, cuál va a ser la capacidad de reacción, pues va a
depender mucho también de la velocidad con que se reparen los
caminos secundarios y terciarios, pero estamos para asistir con todas
las herramientas que tengamos. Vamos hacer todo lo que esté a
nuestro alcance", sostuvo Macri.
El Presidente
adelantó que envió un comité de crisis, que integran fuerzas del
Ejército, de las fuerzas de Seguridad, al Ministerio de Desarrollo
Social y de Hábitat, para asistir a los damnificados y "trabajar
en conjunto con los intendentes y los gobernadores". Según
explicó, las inundaciones son parte del cambio climático. "Esto
sigue pasándonos factura y, claramente, lo que tenemos que tratar de
hacer, dentro de la medida de lo posible, es asistir, estar cerca,
encontrar paliativos", dijo.
Macri, además,
les reclamó a los gobernadores Miguel Lifschitz (Santa Fe), Juan
Schiaretti (Córdoba) y María Eugenia Vidal (Buenos Aires) que
avancen con las obras de infraestructura necesarias para mitigar las
consecuencias de las intensas lluvias. En ese sentido, recordó las
obras que llevó adelante cuando era jefe de gobierno porteño y que
posibilitaron que la ciudad no se inunde como sucedía en el pasado.
"Construir
infraestructura"
"Es muy
importante que entendamos que este cambio en los regímenes de lluvia
vino para quedarse y que lo que hay que hacer es construir
infraestructura. Eso mismo hay que hacerlo en Santa Fe, en la
provincia de Buenos Aires y en Córdoba. Algunas de esas obras ya
arrancaron, otras las están haciendo los gobiernos, pero hay muchas
por hacer", destacó el jefe del Estado.
El ministro de
Agroindustria, Ricardo Buryaile, a cargo de informar al Presidente
minuto a minuto lo que sucede en cada distrito, convocó de urgencia
a la Comisión Nacional de Emergencia y Desastre Agropecuaria
(Cneyda) para mañana. "En primer lugar, sé lo que se siente
vivir una situación así, lo digo como productor ganadero. Venimos a
seguir trabajando, y si bien sabemos que el panorama es grave,
queremos escuchar las necesidades directamente de los damnificados",
manifestó el funcionario, que anteayer estuvo reunido con Lifschitz
y ayer se reunió con productores de la ciudad de Rafaela.
"El proceso
para evitar mayores desbordes está en marcha", destacó
Buryaile, quien remarcó, al igual que Macri, el trabajo en equipo
articulado entre la Nación y las provincias para afrontar la
emergencia. Así buscó poner fin a las diferencias que surgieron en
los últimos días entre el gobierno santafecino y el cordobés por
la responsabilidad de las inundaciones.
Cuando mañana se
sumen Santa Fe, Buenos Aires, La Pampa y Río Negro serán 18 las
provincias en emergencia. Los problemas producto del cambio climático
-incendios e inundaciones-, sumado la falta de obras de
infraestructura son, según el Gobierno, las razones fundamentales
que explican este fenómeno.
En qué consiste
la medida
Norma legal
La ley de
emergencia agropecuaria 26.509 prevé asistencia financiera para
productores agropecuarios afectados por inundaciones o sequías
Postergación
Con informes de
las provincias, la Nación otorga la postergación de pago de
impuestos que gravan el patrimonio y de vencimientos de créditos
hasta el fin del ciclo productivo
Créditos
Se bonifican las
tasas de interés de los créditos en un 25 % si hay declaración de
emergencia (parcial) y 50 % si es desastre (total)
Ayuda directa
Hay un fondo de $
500 millones anuales para otorgar aportes no reembolsables para los
pequeños productores.
Fuente:
Santiago Dapelo, Emergencia en cuatro provincias por la inundación y los incendios, 18/01/17, La Nación. Consultado 18/01/17.
No hay comentarios:
Publicar un comentario