martes, 11 de junio de 2013

"Es sólo 'pintura verde' el proyecto de De la Sota sobre reforestación"

Así se refirió Raúl Montenegro, titular de Funam, a la inciativa de De la Sota para reforestar 80 mil hectáreas en cinco años. "Lo grave es la ignorancia del gobernador (De la Sota). Se pueden plantar árboles, pero no ecosistemas", afirmó el biólogo.

El titular de la Fundación para la Defensa del Ambiente (Funam), Raúl Montenegro, criticó el anuncio del gobernador José Manuel de la Sota de plantar árboles exóticos y nativos en 80.000 hectáreas de Córdoba, porque "eligió de socios a los mismos productores que han venido destrozando lo poco que nos queda".

"Lo grave no está en la asociación sino en la ignorancia que demuestra el gobernador", porque si bien "se pueden plantar árboles, lo que no se puede es plantar ecosistemas. Cada hectárea de ecosistema nativo tiene miles de especies vivas distintas, entre ellas árboles", observó el ambientalista.

“Enhorabuena que se reforesten ambientes en procesos de desertificación, pero es inaceptable que se presente esta iniciativa, que solo es `pintura verde`, como proyecto de reconstrucción ecológica", afirmó el biólogo Montenegro.

Para el ambientalista, "sólo los remanentes de ecosistema nativo pueden regenerar el ecosistema" natural, pero el gobierno local "confunde rejunte de árboles con ecosistemas de bosque nativo".

"Esos ambientes cada vez más aislados y amenazados necesitan que se los deje en paz, que no pasen las máquinas para sacar lo que hay de vida debajo de los árboles", una práctica que "se alentó desde las gestiones de Juan Schiaretti", cuestionó.

De 12 millones de hectáreas a un 4 % de bosque nativo. Montenegro precisó que dos siglos atrás había en Córdoba unas 12 millones de hectáreas de bosque autóctono y hoy queda menos del 4 % de bosque nativo cerrado, cuya destrucción aceleran tanto los incendios como el desmonte y la expansión urbana.

Anuncio de De la Sota. El gobernador cordobés anunció un proyecto de ley para forestar 80.000 hectáreas en cinco años, lo que equivale al 1 % de los predios rurales, erosionados y carentes de bosques, para lo que se requiere la participación de los productores.

El proyecto plantea que apunta a evitar los procesos de erosión eólica e hídrica y proteger los suelos, manteniendo el valor productivo de los campos según criterios ambientales, forestales y productivos, plantando árboles y en especial de especies nativas.

Quienes lo hagan recibirán los beneficios ecosistémicos que suponen los bosques -sostiene la iniciativa- y seguirán contando con la reducción del 30 % que se aplica al impuesto Inmobiliario Rural.

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