Productores
y vecinos de la zona exigieron que se ejecuten obras a corto, mediano
y largo plazo, y eximiciones impositivas. El Estado asegura que se
están haciendo.
Vecinos
de Laboulaye realizaron este mediodía una protesta sobre la ruta 7
en reclamo de obras para las zonas del sur provincial afectadas por
las inundaciones.
La
convocatoria surgió de la agrupación de productores Prascor y se
sumaron representantes de la Sociedad Rural, Federación Agraria,
Centro Comercial de Laboulaye.
En la
ocasión compartieron un petitorio consensuado por todos los
integrantes de esta asamblea para elevarlo a los gobiernos nacional y
provincial. En el mismo, exigen la inmediata ejecución de un plan
integral de trabajo en el cual se contemplen canales, nuevos trazados
de caminos rurales y eximiciones impositivas, entre otros aspectos.
El
discurso
“Deberíamos
estar trabajando, haciendo lo que sabemos hacer… Pero hoy estamos
aquí forzados por la extrema y delicada situación. Nos vemos
obligados a plantear, una vez más, un reclamo que tiene una historia
de 20 años. Hoy, estamos viviendo la séptima inundación desde el
año 2001”, señalan en la introducción de los argumentos del
reclamo.
Y
agrega: “Basta de indiferencia. Este no es un reclamo sectorial. Es
un reclamo de toda la comunidad del Sur de Córdoba y del
departamento Roque Sáenz Peña en particular. Hoy nos autoconvocamos
la producción, el comercio, los maestros, los servicios, el
transporte, los profesionales, los sindicatos y gremios, y ciudadanos
en general con un solo fin: solicitar a nuestros representantes
políticos de manera inmediata soluciones definitivas a corto,
mediano y largo plazo”.
“La
lluvia no es culpa de los funcionarios provinciales, lo sabemos. Pero
es su obligación trabajar para aminorar los perjuicios y arbitrar
todos los medios necesarios para resolver estos acontecimientos.
Después de 18 años de gestión ininterrumpidos, el gobierno de
Unión por Córdoba, que nos prometió en 1999 que “en poco tiempo,
las inundaciones no van afectar más a los cordobeses del sur”,
debería tener las obras necesarias realizadas. Basta de
diagnósticos, basta de soluciones provisorias para resolver
problemas puntuales menores. Basta de promesas. Exigimos soluciones
de fondo. Necesitamos funcionarios capacitados, con decisión,
seriedad, responsabilidad y compromiso. Las distintas áreas
provinciales involucradas deben trabajar en forma conjunta para
evitar que las soluciones se diluyan entre despachos”, expresa.
E
indica: “El escenario es frustrante y devastador: los caminos están
destruidos, se cerraron escuelas, decenas de chicos no pueden ir a
clases, cientos de personas están aisladas ante situaciones de
emergencia, trabajos perdidos, miles de litros de leche derramados,
animales en el agua… Las consecuencias económicas y sociales
afectarán a todos: disminución del consumo y estancamiento del
comercio, deterioro industrial, desempleo, desarraigo y expulsión de
jóvenes y familias a grandes centros urbanos con todas sus
implicancias, alto riesgo sanitario en los sectores carentes de
cloacas y agua corriente, entre otras. Especular con esto se va a
solucionar cuando deje de llover es subestimar a la población y
condenarla a la decadencia. Las consecuencias son a largo plazo”.
Más
adelante, comenta que “una vez más, los ciudadanos vamos un paso
adelante de la clase política. Estamos todos unidos convencidos que
el problema nos afecta a todos, independientemente a que provincia
pertenecemos. Aún los funcionarios de los gobiernos de la provincia
de Córdoba, de la provincia de Buenos Aires, de la provincia de
Santa Fe y del Gobierno Nacional no se pusieron de acuerdo para tomar
la decisión política de resolver este problema. Con las pérdidas
ocasionadas y las que se van a originar, se hubieran pagado
ampliamente las obras necesarias para paliar esta situación”.
Y
añaden: “Sabemos y somos conscientes de que hay un importante
factor climático de excesivas precipitaciones, que vino para
quedarse, por eso es urgente realizar un plan de ordenamiento del
agua. No aceptamos más las explicaciones de “que estamos en una
región histórica de bañados”. Es un concepto antiguo. Hay países
que nos demuestran lo contrario, produciendo en lugares de sequía
extrema o ganándole territorio al mar. En un escenario global que
exige solucionar las carencias de alimentación en el mundo, nos
damos el lujo de destruir millones de hectáreas productivas solo por
la mezquindad de algunos ineptos funcionarios”.
Y
finaliza: “No hay más lugar para medidas paliativas, les pedimos a
los funcionarios que se pongan a la altura de las circunstancias y
piensen en un país que trascienda sus intereses políticos. Es
tiempo de que nuestro reclamo tenga una respuesta concreta y que,
sobre todo, esas respuestas se traduzcan en obras de infraestructura
necesarias”.
Las
respuestas
Frente
a estos reclamos, tanto la Nación como la Provincia destacaron que
se están impulsando obras para las zonas anegadas por el agua. En
ese sentido se pronunció el subsecretario nacional de Recursos
Hídricos, Pablo Bereciartua, que esta mañana llegó a Río Cuarto
para recorrer la construcción de una planta cloacal (ver:
Inundaciones: “La Argentina no tuvo planificación ni inversión”).
Por
otro lado, ayer la Provincia destacó que se ejecutarán diez obras
para brindar soluciones al sur cordobés. Entre las acciones se
mencionan el reservorio Nº 3 de la laguna La Picasa y la
canalización de la laguna El Siete (ver: En Serrano, la Provincia anunció 10 obras por $ 426 millones para el sur).
Fuente:
Reclamo en Laboulaye: "Estamos viviendo la séptima inundación desde el año 2001", 26/05/17, El Puntal de Río Cuarto.
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