miércoles, 25 de febrero de 2015

En Villa Allende, la campaña también chapotea en el barro

Coincide con todo el despliegue de ayuda a los inundados. El jefe municipal, Héctor Colombo, ratificó que se elegirá intendente el 29 de marzo. Políticos empezaron a cruzar chicanas.

por Rubén Curto

En el mismo lodo, todos manoseados. Así, como reza el tango Cambalache, parece que van a afrontar los candidatos las elecciones para intendente de Villa Allende, convocadas para el próximo 29 de marzo. El intendente Héctor Colombo va por la reelección con respaldo del gobierno provincial y apoyo K.

Este período preelectoral tiene la particularidad de hacer coincidir el desarrollo natural de la campaña proselitista con la recuperación estructural de la ciudad tras el temporal del pasado fin de semana largo, que la anotó entre las más damnificadas en las Sierras Chicas.

Villa Allende es hoy foco de atención y asistencia -tanto social como de infraestructura- de los niveles municipal, provincial y nacional, a lo que se suma la actividad de partidos políticos y candidatos, en estos casos cada cual por su cuenta.

Junto a la altruista actitud que supone esa solidaridad colectiva con quienes perdieron todo, se cuela también la especulación electoral.

¿Cómo separar una cosa de la otra, sobre todo en el caso de quienes son oficialismos y administran el Estado?

¿Es indiferente para los votantes recibir electrodomésticos de manos de un funcionario en campaña? Y, por el contrario: ¿Cómo no hacer campaña si hay una elección confirmada y hay que salir a buscar votos y convencer al electorado?

Villa Allende quedó atrapada en estas contradicciones, que 
ya empezaron a aflorar bajo el formato de acusaciones cru­zadas por supuesto clientelismo y aprovechamiento político de la tragedia.

En ese sentido, se pueden ano­tar: la sobreactuación del gobernador elogiando la “valentía” del intendente Colombo para res­catar a una persona del río; la irrupción de La Cámpora, con pecheras identificatorias, y las acusaciones a Eduardo “Gato” Romero por administrar individualmente ayuda del PRO, entre otros episodios que trascendieron en los medios.

A las urnas
“Nadie está especulando por 
las elecciones; eso ha pasado a segundo plano. La magnitud 
del hecho nos obliga a superar cualquier diferencia”, dijo ayer tajante el intendente Colombo y repartió agradecimientos por igual a otros municipios, a la Provincia y a la Nación.

Confirmó que con la oficialización de las listas se están “cumpliendo los plazos electorales” y también relativizó que, aun cuando este recibiendo un fuerte espaldarazo de la Provincia, su situación sea favorable electoralmente.

“Cuando uno va a una elección siendo oficialismo, pone 
a criterio la gestión. Ponemos todo el esfuerzo para que nos vuelvan a elegir. Sé que soy 
el que más expuesto está”, analizó, ­interpretando que lo del tem­poral puede ser un arma 
de ­doble filo, según como lo tomen los vecinos.

Colombo busca repetir mandato, tras haber cerrado una sorpresiva alianza con el kirchnerismo. En esa apuesta, lo acompañará Lucas Alonso, 
de La Jauretche, agrupación que desembarcó en la ciudad con hidrolavadoras y pecheras identificatorias de sus mili­tantes.

El actual intendente enfrentará, entre otros, al macrista Eduardo “Gato” Romero y al exintendente Heriberto Martínez (UCR), que no lograron replicar en Villa Allende la exitosa alianza que cerraron, por ejemplo, en Marcos Juárez, y que quieren extender a toda la provincia.

Justamente, Martínez dijo ayer que le parece “una locura” realizar los comicios en estas condiciones. “Yo no estoy haciendo campaña. Me da vergüenza salir a hacer campaña en esta situación. Hubiera ­querido que se suspendieran 
las elecciones. Que vengan el ­gobernador (De la Sota) y ­(Daniel) Passerini (ministro 
de Desarrollo Social) y se ins­talen a entregar electrodo­mésticos, me parece que no corresponde. Es campaña encubierta”, se quejó.

Hasta “el Gato” Romero (PRO) debió dar explicaciones, ante acusaciones que le lan­zaron, por presuntamente ­acopiar ayuda solidaria en su domicilio. El golfista y candidato señaló que eso sólo ocurrió con un camión y al día siguiente del temporal, cuando todavía no se había conformado el comité de crisis. Igual, lo cascotearon como para que se vaya amoldando a la compleja campaña que viene.

Primeras urnas municipales
Trío. Junto a Villa Dolores y La Falda, Villa Allende es uno de los municipios que abrirá el fuego electoral del año, con comicios pautados para el 29 de marzo, con lo cual ya la campaña electoral está -o debería estar, en condiciones normales- a pleno.

Distintos colores. Son tres ciudades más o menos equiparables en su peso político relativo a nivel provincial, pero las gobiernan tres fuerzas políticas diferentes: Villa Dolores es territorio K, con Juan Pereyra; en La Falda, va por la reelección el radical Eduardo Arduh; en Villa Allende, busca repetir el peronista Héctor Colombo, a través del cual el PJ quebró en 2011 una supremacía que la UCR extendía desde 1983.

Extra. Además del singular hecho que implica hacer campaña tras un temporal histórico, la pulseada en Villa Allende tiene muchos condimentos de interés provincial. Por ejemplo, la llamativa alianza que a último momento selló el oficialismo con el kirchnerista Frente para la Victoria; o el hecho de que en esa ciudad no se haya podido sellar una alianza entre la UCR y el PRO, que dividirán el voto opositor y -se supone- acrecentarán las chances del intendente Colombo.

Fuente:
Rubén Curto, En Villa Allende, la campaña también chapotea en el barro, 24/02/15, La Voz del Interior.

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