Otro día de furia a causa de las lluvias

Más de la mitad de los barrios tuvieron problemas de anegamiento en las calles y en viviendas. Al menos 40 familias se autoevacuaron. Un conductor fue rescatado cuando se lo llevaba la corriente en Alto Alberdi. Hoy seguirán las precipitaciones.

Defensa Civil de la ciudad de Córdoba calificó ayer la situación generada por la gran cantidad de agua que cayó como “muy complicada y peligrosa”. Durante la tarde y el anochecer, la capital provincial fue cubierta por lluvias que complicaron gran parte de su ejido. Al cierre de esta edición, superaban los 70 milímetros.

De acuerdo con fuentes oficiales, más de la mitad los barrios sufrió algún tipo de anegamiento, y un elevado número de viviendas fueron invadidas por el agua.

El número telefónico 103 estuvo completamente sobrecargado, en ocasiones, sin capacidad de respuesta. Existieron protestas vecinales, como por ejemplo la de vecinos de barrio Richardson, quienes efectuaron un corte en Plaza de las Américas para pedir ayuda puntual, pero también para efectuar una demanda habitacional, puesto que viven en condiciones de suma precariedad.

De hecho, entre los manifestantes se encontraban miembros de cinco familias domiciliadas en calle Belgrano al 1500, que debieron ser evacuadas. Allí hubo un operativo con Bomberos, Policía y Defensa Civil.

Familias evacuadas

El director de Emergencias de la Municipalidad, Hugo Garrido, dijo que las zonas más afectadas involucraron a los barrios Bella Vista, Villa Los Artesanos, Villa Mafekin, Villa Urquiza y José Ignacio Díaz Tercera Sección.

Oficialmente, se estimó en 40 la cantidad de hogares que debieron ser evacuados. No obstante, ninguna persona fue llevada a los centros de asistencia, ya que las familias optaron por acudir a domicilios de parientes y dejar siempre una o dos personas en las casas anegadas.

“No tenemos gente en los lugares de evacuación porque las familias prefieren autoevacuarse. Es decir, prefieren que quede el jefe de familia y alguien más para cuidad el hogar”, explicó Garrido.

El funcionario explicó que el operativo en la ciudad incluyó tres cuadrillas completas, más personal de otras dependencias (provinciales). En barrio José Ignacio Díaz Tercera Sección, la situación era preocupante, debido a una obstrucción en desagües realizados por Caminos de las Sierras. Vecinos desesperados llamaron a las autoridades y a los medios. “Notificamos a Provincia y allí activaron el llamado a Camino de las Sierras, se está trabajando allí con premura”, dijo Garrido.

Panorama

El arroyo La Cañada llevaba agua como si se tratase de un río caudaloso, aun bajando hacia el centro, donde desemboca al río Suquía.

Asimismo, la avenida Costanera en toda su extensión fue cortada, para impedir la circulación. Las vías estuvieron absolutamente tapadas. En la parte nueva, Villa Urquiza, el río se desbordó, complicando los hogares de los vecinos.

La postal de automóviles -inclusive de modelos nuevos- varados en calles convertidas en ríos fue repetida. Entre la correntada, los baches escondidos y autos parados, transitar se hizo una actividad de riesgo.

Por las características topográficas de la ciudad, el escurrimiento del agua fue violento y rápido en las principales arterias en bajada. Eso provocó que basura y algunos elementos viales (como carteles de obras) fueran arrastrados.

Conductor rescatado

Bomberos rescataron a un automovilista que era arrastrado por la correntada en barrio Alberdi. Sucedió ayer, a las 17, en calles Páez Molina y Costanera. Según fuentes policiales, el hombre de 50 años iba al comando de un Chevrolet Prisma cuando se vio sorprendido por el agua acumulada. El coche comenzó a ser arrastrado, sin que el conductor pudiera salir. Un vecino llamó al 101 de la Policía. Acudió una dotación de Bomberos que logró rescatar sano al conductor. El auto, en tanto, tuvo que ser retirado con una grúa privada.

Plan de la Provincia

El ministro de Desarrollo Social, Rodrigo Rufeil, avisó que en caso de ser necesario, y si el municipio lo requiere, Provincia arbitrará medios para armar un centro de evacuados.

Se hundió un tramo de la calle Bunge

Colapsó el desagüe. El desagüe inaugurado el año pasado en calle Bunge, en barrio Iponá, no soportó la lluvia caída ayer y colapsó. Esto provocó el anegamiento de las calles y el ingreso de agua en algunas viviendas. Vecinos del barrio contaron que sacaron bolsas de Cotreco del barrido que tapaban el desagüe. Además, producto de esta situación se hundió un tramo de la calle Bunge (al 2800, esquina Carlos Molina). Fueron unos 10 metros en los que literalmente desapareció la calzada.

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Fuente:

Otro día de furia a causa de las lluvias, 08/02/16, La Voz del Interior. Consultado 08/02/16.