viernes, 24 de octubre de 2014

“Es una victoria del movimiento estudiantil”

Entrevista a la principal agrupación de estudiantes de Agronomía, luego de la derogación del convenio. Las dudas sobre el supuesto glifosato del martes pasado.

por Lea Ross

Finalmente, el decanato de la Facultad de Agronomía de la UNC resolvió dejar sin efecto el convenio con Monsanto, mediante la resolución decanal número 970. Luego de varias movilizaciones realizadas en distintos puntos de la Ciudad Universitaria, el polémico Marcelo Conrero decidió tomar esta decisión luego de unos frenéticos tres meses de gestión. La discusión, a su vez, quedó casi opacada por los hechos ocurridos el martes pasado en el Consejo Superior, a partir de las últimas movilizaciones desarrolladas adentro del recinto.

ECOS Córdoba entrevistó a Cynthia Garay y Franca Giannini, estudiantes del MBA/Sudestada -principal fuerza estudiantil de Agronomía- e integrantes del Consejo Directivo de Agronomía, para conocer el panorama actual dentro del campus.

ECOS Córdoba - ¿El convenio está derogado?

- Cynthia: Sí, esta derogado. Quizás no hubo claridad por las intervenciones del Consejo Superior de ayer (o sea, el martes pasado). Pero sí, estuvimos hablando en la facultad y se encuentra derogado. Esto es una victoria del movimiento estudiantil. Demostramos que cuando nos organizamos y luchamos, pudimos darle el brazo torcer a Conrero y también a la gestión de Cambio Universitario (lista oficialista) y a (Francisco) Tamarit (actual rector de la UNC).

ECOS - ¿Por qué “a Tamarit”?

- Cynthia: Porque el señor rector tenía la potestad. Si bien hay marcos legales en los que no se puede entrometer, como Sudestada habíamos presentado un recurso jerárquico que era el mecanismo que él tenía en sus manos para ir a accionar, para derogar el convenio. ¿Por qué? Porque tenía vicios formales y atentaba contra la autonomía de la universidad. Y aun así todo, ese recurso jerárquico nunca llegó a discutirse en el Consejo Superior. Sin embargo, esto es una victoria. Como Sudestada, hemos estado accionando debates, foros y festivales, toda una campaña masiva bajo el eslogan “Fuera Monsanto en la UNC”. Y hemos logrado una presión para que hoy termine resultando en la derogación del convenio. Es una alegría inmensa.

ECOS - Pero aún así, ¿va haber una concentración este viernes?

- Cynthia: Para el viernes a las 15 hs. estamos convocando movilizar al Consejo Directivo de Agronomía, porque ahí vamos a tener las certezas que esperamos tener. Porque si bien este convenio esta derogado, todavía queda una instancia de debate institucional, que se va a realizar el miércoles 29 de octubre, y que tiene por definición que la institución debata en torno si conviene o no tener un convenio con Monsanto, de cara a otro convenio. La derogación es una victoria, pero la lucha continua.

- Franca: A partir de las presiones que se fueron generando en distintas vías, fue lo que se pudo dar en la situación de hoy. Fueron muchos los mecanismos que se generaron para contrarrestar todas las posiciones. Si bien creemos que todas las acciones sumaron y aportaron, los acontecimientos del día de ayer (martes) no los acompañamos. Es más, los consideramos contraproducentes y realmente violentos por demás, que esas no son las formas que nosotros queremos construir. Y que, de hecho, entorpecen los procesos que hemos estado dando con un montón de esfuerzo a lo largo de todo este tiempo.

ECOS - ¿Por qué creen que Conrero firmó ese acuerdo con Monsanto?

- Franca: Los intereses son muchos. Por un lado, hay intereses personales. Lo puede ejemplificar la relación que tiene el secretario general, que es el dueño de la consultora que hizo el primer estudio de impacto ambiental de Monsanto en Malvinas. También lo ejemplifican el ímpetu con el que el decano ha querido llevar el convenio adelante, desoyendo las voces internas de la facultad disidentes, desoyendo de todas las observaciones que habían alrededor de as formas que tenía el convenio, desoyendo el posicionamiento de la Universidad. La empresa venía a buscar cierta legitimación en nuestra casa, porque realmente esta muy cuestionada a nivel mundial y en Córdoba con mucha fuerza. Somos blanco de eso.

- Cynthia: Esta bueno decir que la lucha no termina acá, porque lo que resulte de este debate del 29 de octubre va a ser para que Conrero después salga a decir que la facultad debatió y que ahora es legítimo. Porque es una metodología armada a la medida de Conrero y Monsanto. Pero nosotros creemos que este debate es extemporáneo e ilegitimo, y la certeza de que si sigue en pie este debate o no la vamos a tener el viernes. Por el momento, tenemos entendido que sí se va a dar, pero bajo otro contrato con la multinacional.

ECOS - Todo el debate se generalizó apuntando a la relación que establece la universidad con las multinacionales. ¿Cómo ven esa relación entre esas empresas con la universidad o, en particular, con su facultad?

- Franca: Es una vinculación que hoy no se discute. Identificamos que las no acciones a nivel universidad pasan por ese lado; de no querer discutir cómo es la vinculación de la universidad pública con estas empresas en general. Es una discusión que nuestra universidad está pendiente y nuestra facultad esta dando claros ejemplos de una cierta mercantilización de la educación. Entendemos que las fallas educativas que hoy vienen de la mano de articulaciones con privadas y las estamos naturalizando. Entendemos a la vinculación como algo fundamental, pero creemos que tiene que haber una discusión abierta y bastante profunda en la comunidad universitaria, porque se está tendiendo a eso, a depender de fondos e intereses privados para tomar decisiones.

- Cynthia: Sí. También es una locura pensar que las multinacionales vienen a hacer convenios con la universidad pública. Y por otro lado, si bien este convenio abrió un frente de lucha estudiantil y abrió caminos a la participación y a la organización estudiantil, lo que se tiene que poner en discusión profundamente es una discusión que no se da y que la universidad, a 400 años, tiene una base dada sobre la mercantilización de la educación y que resulta bastante problemático. La universidad aun no ha generado mecanismos para frenar la mercantilización y esa es la profunda discusión que se debe.

Violencia institucional

En un documento conjunto, firmado por la Asamblea de Malvinas Lucha por la Vida, la CTA y la Red de Médicos de Pueblos Fumigados, celebraron la derogación y afirmaron no haber participado de la movilización del martes pasado: “No podemos, sin embargo, desconocer que los primeros hechos de violencia fueron los llevados a cabo por las autoridades de la FCA y Monsanto que firmaron un convenio ilegal a espaldas de los estudiantes y a escondidas de todos los ciudadanos, que pretendía legitimar la instalación de Monsanto en Malvinas Argentinas. Este tipo de violencia institucional no puede gestar nada positivo, aunque afirmamos que no se puede responder con violencia a más violencia”, señalaron.

¿Glifosato?

Entre las intervenciones desarrolladas el día martes, se roció con un líquido al decano de Agronomía. Sorpresivamente, el diario La Voz del Interior sentenció que Conrero fue rociado con glifosato. En ningún tramo de sus notas, aclararon cuál fue su fuente para confirmar ese dato. De hecho, el propio decano señaló a Canal 10 que se enteró por el propio matutino sobre esa posibilidad. Hasta el día de hoy, no se ha confirmado esa información. Según testimonios, se trataba en realidad de agua con jugo.

Amplio rechazo de empresarios a los incidentes en la UNC

La fiscal López de Filoñuk intervino de oficio por hechos violentos de grupos anti-Monsanto. Cruce entre Tamarit y Conrero.

Un día después de los violentos incidentes en los que un grupo ambientalista amenazó y agredió a miembros del Consejo Superior de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) para forzar la derogación de un convenio entre Monsanto y la Facultad de Ciencias Agropecuarias, el sector empresario de Córdoba salió ayer en bloque a repudiar los hechos.

En tanto, la fiscal federal Graciela López de Filoñuk intervino de oficio, sin que las autoridades de la UNC formularan una denuncia. A pedido de la magistrada, la universidad proveyó información requerida, cuyo contenido no trascendió.

El Grupo de los Seis, que nuclea a las mayores cámaras empresarias de la provincia, repudió los hechos. “Asistimos, una vez más, a medidas de acción intempestivas y desproporcionadas que dañan sensiblemente a nuestro sistema democrático; que afectan el debate plural”, señalaron la Bolsa de Comercio de Córdoba, la Cámara de Comercio de Córdoba, la Cámara de Comercio Exterior de Córdoba, la Cámara de la Construcción, la Federación Comercial y la Unión Industrial Córdoba.

Por su parte, la Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona (Cartez), rechazó “de manera enfática la actitud de activistas que, encapuchados y armados con palos, botellas y hasta con picanas eléctricas para ganado coparon el recinto”. Y señaló su inquietud por “la pasividad y permisividad con que las autoridades universitarias actúan, posibilitando que la barbarie acalle la voz de la ciencia con actitudes distintivas del autoritarismo propio de la democracia debilitada”.

En tanto, ayer el rector de la UNC, Francisco Tamarit, volvió a rechazar el accionar de los activistas anti-Monsanto. “Ellos sabían que la resolución estaba derogada y no les importó para nada”, indicó.

Luego agregó: “Incluso hubo una persona muy iracunda que se burló, haciendo referencia a mi condición de paciente oncológico. Fue de un grado de irracionalidad, falta de humanidad y perversión”. Tamarit negó que los violentos “hayan impuesto su opinión”.

Pero Marcelo Conrero, decano de Ciencias Agropecuarias, no dijo lo mismo: “Teníamos vinculación con empresas que venían haciendo ensayos, en ese marco decidimos institucionalizar acuerdos, entre ellas estaba Monsanto (...). Me parecía que era importante llevar conocimiento a temas que se los toma ideológicamente y no científicamente. El rector decía que (ese convenio) no se condecía con una declaración que sacó la Universidad. Decidimos suspender el convenio y generar un debate”, sostuvo. Pero dijo que luego empezó “una campaña pidiendo la derogación” del acuerdo con Monsanto.

Monsanto: cada cual puso su granito violento

Todos repudian la agresión al decano de Ciencias Agropecuarias. Pero muchos son responsables de haber llegado a esta situación.

por Edgardo Litvinoff

La reciente agresión de militantes anti-Monsanto al decano de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNC, Marcelo Conrero, despertó la indignación de muchos. Pero la mayoría de los indignados no sólo reaccionaron tarde, sino que tienen algo de responsabilidad por llegar al punto en el que hoy se encuentra la situación.

El Gobierno de Córdoba. Impulsó, permitió, silenció, dio marcha atrás, volvió y se lavó las manos, en ese orden, respecto de la radicación de esta empresa en Malvinas Argentinas. Permitió que la construcción de la planta comenzara aun sin la presentación del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) y sin la audiencia pública previa, previstas en la ley, y sentó la primera base para el reclamo jurídico respecto de la radicación de Monsanto. Apenas comenzada la polémica, silenciaron su postura. Impulsaron una nueva ley de ambiente. Se niegan a difundir el primer EIA rechazado, aun cuando se trata de información pública, y mantiene un peligroso statu quo que dilata y complejiza los enfrentamientos.

Monsanto. La empresa podría haber seguido los pasos que marcaba la ley, aun cuando el Gobierno de Córdoba no se los exigió. Manejaron mal su comunicación, en especial al inicio del conflicto, y comenzaron una campaña comunitaria cuando el agua les llegaba al cuello.

Ambientalistas. Sería injusto poner a todos en la misma bolsa. Hay agrupaciones y militantes de todos los colores y sabores. La única crítica común que podría caber es que, en el fondo, la mayoría de ellos está en contra del modelo productivo sojero que sostiene la economía argentina. Y esto excede a Monsanto, al intendente y al gobernador de una provincia. Es una discusión que más amplia que debería darse a nivel nacional, aunque no parece existir esa intención. Por esta razón, a veces se utilizan argumentos que, en realidad, sólo buscan contener al anterior. La violencia es uno de ellos.

UNC. Es comprensible que a la Universidad Nacional de Cordoba -con la autonomía de la que disponen sus facultades- se le dificulte consensuar una posición común. Por eso hay decisiones contradictorias: por un lado la UNC cuestiona las bases legales sobre la que se montó la empresa y, por el otro, la Facultad de Ciencias Agropecuarias hace un convenio con Monsanto, que ahora derogó. Pero la Casa de Trejo sigue siendo incapaz de dar el verdadero debate de fondo, en todas sus aristas. Como recuerda en su Facebook el periodista Sergio Carreras, "en los últimos años la UNC rechazó la minería a cielo abierto, los cultivos con semillas modificadas, la sojización. Eso sí: quiso enseñar ayurveda, medicina tradicional china y homeopatía".

Monsanto: denuncia penal contra los agresores del decano de Agropecuarias

Será presentada por el propio Conrero contra los activistas que lo atacaron con químicos. La Justicia ya interviene por los hechos en el Consejo Superior de la UNC. Actuación del Inadi.

El decano de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad Nacional de Córdoba, Marcelo Conrero, demandará a los activistas que lo agredieron con químicos (posiblemente glifosato) en la sesión del Consejo Superior que anuló el convenio entre esa unidad académica y la empresa Monsanto.

La Justicia federal ya intervenía de oficio merced a una actuación de la fiscal Graciela López de Filoñuk que comenzó a investigar los hechos apenas tuvieron difusión pública.

El hecho mereció el repudio de la conducción de la UNC, encabezada por Francisco Tamarit, además de numerosos asociaciones y entidades.

El Inadi Córdoba expresó su preocupación por los hechos y ha solicitado una serie de elementos para determinar si corresponde algún tipo de pronunciamiento.

Conrero designó como representante al abogado Miguel Ortiz Pellegrini, quien confirmó la presentación de una denuncia penal.

El decano concurrirá al despacho de la fiscal para exponerle los hechos, según explicó su abogado.

Fuentes:
Lea Ross | @LeandroRoss, “Es una victoria del movimiento estudiantil”, 23/10/14, ECOS Córdoba.
Amplio rechazo de empresarios a los incidentes en la UNC, 23/10/14, La Voz del Interior.
Edgardo Litvinoff, Monsanto: cada cual puso su granito violento, 23/10/14, La Voz del Interior.
Monsanto: denuncia penal contra los agresores del decano de Agropecuarias, 23/10/14, La Voz del Interior.

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