La 18ª conferencia de la ONU sobre cambio climático se inauguró en Doha,
en presencia de representantes de 190 países.
La concentración sin precedentes de gases con efecto de
invernadero (GEI) en la atmósfera y el riesgo de un calentamiento de 4º C hacia
2060 han llevado a que se produjeran llamados de alerta en vísperas de la
conferencia de la ONU
organizada por Catar, campeón mundial de las emisiones de GEI por habitante.
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"El presente son los medios de aumentar el nivel de
ambición en forma urgente", es decir, que los países asuman compromisos
más fuertes en materia de reducción de GEI, explicó.
Por el momento, las iniciativas adoptadas por los diversos
países para reducir sus GEI están lejos de permitir contener el calentamiento a
+2º C, el objetivo de la comunidad internacional y límite más allá del cual el
sistema climático podría dispararse, con efectos incontrolables.
"El futuro es el marco que se impondrá a todos, con
equidad y en conformidad con lo que requiere la ciencia", añadió.
Figueres se refería al acuerdo mundial, previsto en 2015 y
que debe entrar en vigor en 2020, que comprometerá a todos los países,
incluyendo a China, el mayor contaminador del mundo, repartiendo entre ellos
los esfuerzos para limitar el calentamiento.
En Doha se esbozarán las bases de ese acuerdo.
"Se trata de una conferencia de una importancia
vital", declaró por su parte su presidente, el viceprimer ministro catarí
Abdula Al Atiya.
"Debemos trabajar seriamente durante las dos próximas
semanas (...), mostrar flexibilidad y no perder el tiempo con cuestiones
marginales (...) para lograr un acuerdo sobre el acto II del Protocolo de
Kioto", agregó.
100.000 millones de dólares
La firma de un segundo período de compromiso de Kyoto,
después de la expiración del primero, a fines de 2012, será uno de los grandes
temas, aunque tendrá un alcance simbólico.
Su principio fue decidido en Durban (Sudáfrica), a fines de
2011. En Doha, los países deberán ponerse de acuerdo sobre la duración de Kioto
2 y sus objetivos de reducción de GEI.
Pero Kyoto 2 podría limitarse al 15 % de las emisiones de GEI
mundiales -las de la
Unión Europea y de Australia-, ya que Canadá, Rusia y Japón
no quieren participar y Estados Unidos jamás ratificó el tratado.
La cuestión de la ayuda a los países más vulnerables también
ocupará una parte de los debates.
En Copenhague, a fines de 2009, la comunidad internacional
decidió desbloquear 100.000 millones de dólares por año hasta 2020,
administrados por un Fondo Verde, así como una ayuda urgente de 30.000 millones
de dólares entre 2010 y 2012.
"Dentro de un mes, la ayuda urgente se terminará y el
Fondo Verde sigue vacío", se lamentó la organización no gubernamental
Oxfam.
La conferencia continuará hasta el 7 de diciembre. El 4 de
diciembre, los negociadores contarán con la participación de más de 100
ministros para concluir un acuerdo, en una nueva etapa del laborioso proceso de
negociaciones lanzado en 1995.
La lucha contra el cambio climático: ¿qué es el Protocolo de
Kyoto?
Elementos para comprender el único instrumento jurídico
internacional que obliga a los países ricos reducir sus gases de efecto
invernadero.
La principal meta de la conferencia de la ONU sobre cambio climático,
que se abre en Doha, con la participación de unos 190 países, es la renovación
del primer período de compromiso del Protocolo de Kyoto, que expira el 31 de
diciembre.
A continuación explicamos algunos elementos para comprender
el único instrumento jurídico internacional que impone a los países ricos
reducciones obligatorias de sus emisiones de gases de efecto invernadero.
¿Qué es?
El Protocolo de Kioto es el logro principal de la Convención Marco
de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), el foro establecido en la Cumbre de Río en 1992.
Este tratado internacional -el único que establece objetivos
sometidos a la ley para controlar gases invernadero- ha sido ratificado por 192
países además de la
Unión Europea (UE).
Estados Unidos firmó el acuerdo pero se niega a ratificarlo.
Bajo obligación, 37 economías industrializadas (denominadas países del
"Anexo 1") se comprometieron a reducir las emisiones totales de los
seis gases principales -dióxido de carbono (CO2), metano (CH4), óxido de
nitrógeno (N20) y tres fluoruros (HFC, PFC, SF6)- en al menos 5 % para 2012, en
comparación a 1990.
Los países en vías de desarrollo (categoría "Anexo
2") no quedaron vinculados a un compromiso cifrado de reducción de gases,
limitándose a un llamamiento general a acabar con la contaminación, bajo el
principio de que son los países ricos los responsables, históricamente, del
calentamiento global.
¿Cómo funciona este acuerdo?
Las 37 economías industrializadas del Anexo 1 pueden cumplir
sus objetivos de la manera que les convenga, incluso mediante el intercambio de
carbono.
El Protocolo también posee dos instrumentos únicos y
propios, conocidos como el Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL) y la Implementación Conjunta.
Al invertir en proyectos de tecnología limpia en economías
en desarrollo o en el ex bloque soviético, las economías avanzadas obtienen
créditos de carbono que pueden vender, o ser compensadas por sus cuotas de
emisiones.
Países que no llegan a cumplir sus objetivos de emisiones
deben compensar por la diferencia, además de que se les asigna una penalidad de
30 %, en cualquier segundo periodo de compromiso.
En 2009, las emisiones de dióxido de carbono (CO2) por
países del Anexo 2 estaban 6,5 % por debajo de su nivel en 1990, de acuerdo a la Agencia Internacional
de Energía (AIE). Pero esta cantidad oculta grandes diferencias dentro del
grupo. Canadá en particular registra una emisión de carbono mucho mayor que la
de su objetivo.
Historia atribulada del tratado
El Protocolo fue adoptado por la CMNUCC como parte de un
"marco" de 21 páginas firmado el 11 de diciembre de 1997, después de
30 meses de negociaciones.
Siguieron varios años de discusiones debido a un muy
complejo reglamento, especialmente el conteo de áreas forestales como esponjas
de carbono, que pueden ser contrapuestas a emisiones nacionales, lo que muchos
ecologistas consideran una escapatoria, una excusa.
En marzo de 2011, el Protocolo fue casi destrozado cuando el
entonces presidente norteamericano George W. Bush abandonó el pacto al llamarlo
injusto y demasiado costoso para la economía estadounidense. Aun así, el
acuerdo sobrevivió gracias al apoyo de la Unión Europea.
La reticente ratificación de Rusia retrasó la
implementación, la cual finalmente se produjo el 16 de febrero de 2005.
Futuro incierto
La reunión de Doha aspira a aprobar un segundo periodo de
compromiso de este Protocolo, a partir de 2013. La prolongación del Protocolo
fue decidida durante la última conferencia de la ONU sobre el clima, en el 2011 en Durban, tras la
expiración del primer periodo de compromiso.
En Doha, el debate se centrará sobre la cuestión fundamental
y espinosa de "la igualdad", es decir, la repartición de los
esfuerzos entre países del norte y sur para frenar el calentamiento.
Estos últimos insisten sobre la "responsabilidad
histórica" de los primeros en el calentamiento del planeta, y en el hecho
que ellos tiene, a su vez, "derecho al desarrollo".
A los países en desarrollo les conviene Kioto por sus cláusulas
estrictas de conformidad y verificación, además de las
"diferenciadas" distribuciones de cargas entre los países
industrializados y los pobres.
Pero en los países ricos, el apoyo a Kioto se ha agotado
después de la tempestuosa Cumbre de Copenhagen en diciembre de 2009, la cual
estableció compromisos voluntarios con el fin de limitar el calentamiento del
planeta a 2°C .
Muchos críticos dicen que el tratado de Kioto es anticuado,
y que es injusto, porque no impone control de emisiones a China y Estados
Unidos, quienes juntos representan el 41 % de las emisiones mundiales de CO2.
Brasil, India e Indonesia, grandes emisores en desarrollo, tampoco los tienen.
Según cifras de la
ONU , los países en desarrollo representan 54 % de emisiones de
CO2, responsables del calentamiento de la superficie de la tierra, y Estados
Unidos el 18 %. Los países de Kioto de categoría Anexo 1 representan sólo 25 %.
Fuente:
Cumbre de Doha, con la mira puesta en el Protocolo de Kyoto, 26/11/12, Observador Global.com. Consultado 26/11/12.
La lucha contra el cambio climático: ¿qué es el Protocolo de Kyoto?, 26/11/12, Observador Global.com. Consultado 26/11/12.
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