Sierras chicas, mentiras grandes

A un año de las inundaciones, la anarquía territorial en las localidades de las Sierras Chicas, una de las causas del desastre, se mantiene tal cual. La Provincia inventó hace una semana el Concejo de Planificación, pero sigue habilitando countries.

“Este plan pretende generar un gran avance en materia de desarrollo sustentable, planificación, crecimiento y ordenamiento del todo el cordón de Sierras Chicas” dijo el Ministro Fabián López el pasado 5 de febrero, cuando él y los intendentes de Mendiolaza, Saldán, Villa Allende, Unquillo y otras localidades, dejaban inaugurado el Consejo de Planificación. Si se desconocieran los antecedentes y las motivaciones políticas y empresariales de los dirigentes de la región, no habría más que festejar la noticia.

Pero el presente impide no advertir que en el anuncio no hubo más que bombas de humo. El Consejo también está integrado por el Iplan, organismo provincial que conduce el radical Guillermo Irós y que fue creado en la primera gestión de Schiareti para eso: reordenar el caos territorial de la Gran Córdoba. Dibujos, proyecciones e ideas: un montón. Resultados: ninguno.

Pero hagamos de cuenta que Irós y los suyos no tienen la culpa. Y que la planificación ahora será en serio. ¿En serio? ¿Crear un año después un organismo planificador cuando en el medio se siguieron autorizando emprendimientos inmobiliarios que aseguran más inundaciones? Volvamos: sería una gran idea, pero es parte de una gran mentira.

En Mendiolaza, pese a la lucha de los vecinos, ya se trabaja en el desmonte de El Terrón, el nuevo country de la familia Tagle, que ya es propietaria de Q2 en la misma localidad y se caracteriza por prestar autos de su flota a su amigo el intendente, Daniel Salibi. Quien a su vez jamás niega un permiso de obras, aún cuando lo solicitado vaya en contra de la recomendación de biólogos, ambientalistas y hasta el más puro sentido común.

EL Terrón son 171 hectáreas de monte nativo que se van a transformar en 5 barrios privados y una cancha de golf. Y no sólo cuenta con el visto bueno de Salibi. Fue la Provincia, la misma que ahora crea el ‘Consejo de Planificación’, la que autorizó que la obra avanzara, pese al ruego de los vecinos. Lo de El Terrón es solo una prueba más de que a un año de las inundaciones, en Sierras Chicas solo hay mentiras grandes.

Fuente:

Sierras chicas, mentiras grandes, 15/02/16, Matices. Consultado 18/02/16.