martes, 9 de febrero de 2016

Las secuelas que dejó la última gran tormenta

Anoche, quedaban 76 evacuados. Hubo casas anegadas, cortes de luz y desagües tapados. Un muerto por un rayo en Guiñazú.

La intensa lluvia que el domingo castigó a la ciudad de Córdoba siguió dando coletazos, porque durante la madrugada de ayer siguió cayendo agua. En sólo 24 horas, entre las 9 del domingo y las 9 del lunes, se midieron 153 milímetros. Hubo más de 100 evacuados (al cierre de esta edición algunos volvían a sus hogares), viviendas anegadas, cortes de luz, pozos negros colapsados, medianeras volteadas, desagües tapados y semáforos fuera de servicio. Los sectores humildes sufrieron más anegamientos y pérdidas materiales.

El tramo céntrico de la aveni­da Costanera estuvo cerrado al tránsito y así seguirá hoy (entre los puentes Bicentenario y Cantón en su margen norte, y entre el Bicentenario y el Santa en la margen sur). También el vado Sargento Cabral. Dos válvulas del dique San Roque permanecieron abiertas ayer, para desa­gotar la gran cantidad de agua acumulada río arriba.

El agua fue impiadosa con varias calles: resucitó baches y deterioró o hundió el asfalto.

Desbordada por los reclamos, la Municipalidad brindó asistencia a damnificados. Fueron evacuados en el Polideportivo General Paz 85 vecinos de villas El Chaparral y El Milagro, y de barrio José Ignacio Díaz 4ª Sección, 76 de los cuales continuaban anoche allí. Otros 18 fueron llevados al centro vecinal de barrio Mafekin, pero al atardecer volvieron a sus casas.

Rayo fatal
Por la tormenta, el domingo a la tarde un rayo mató a Claudio Segura (22) en barrio Guiñazú, mientras jugaba al fútbol. Ocurrió en calle Los Milagros y la cancha del Club El Trébol.

Vecinos que padecieron anegamientos en sus viviendas y hundimiento de pozos negros en barrio San Pablo cortaron ayer calle Huascha. Una de las familias más afectadas vive en calles Pehuajó y Argenor Noroña. También en Mafekin hubo inundaciones. Muchas familias no quisieron abandonar sus viviendas para no sufrir saqueos.

A la altura del puente de Circunvalación que divide los barrios José Ignacio Díaz 3ª y 4ª, vecinos cortaron la avenida en protesta por los anegamientos y las pérdidas. Algo similar ocurrió en villa Los Ávalos, con cortes en Santa Ana 4600.

El subsecretario de Emergencia Urbana, Hugo Garrido, reveló que el municipio limpió calles y desagües, sobre todo en la zona del arroyo El Infiernillo, donde se taparon tres cañerías con basura.

Una empresa empezó a rellenar el desagüe de calle Bunge. En Quebrada de las Rosas, el agua se embalsó en un patio e hizo presión sobre las medianeras, que terminaron derrumbadas. Hubo varias casas afectadas y pozos negros socavados.

La Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec) restituyó el servicio en cuatro distribuidores de media tensión que dejaron de funcionar entre la noche del domingo y la madrugada de ayer. Entre 25 mil y 30 mil usuarios se quedaron sin luz en diversos barrios. A la mañana de ayer fue normal el servicio. “Persisten cortes puntuales en algunas cuadras y reclamos de usuarios particulares en baja tensión”, dijo Fernando Leyría, vocero.

En el interior
El titular de Defensa Civil provincial, Diego Concha, alertó por las crecidas en ríos serranos. Por caso, el de Mina Clavero creció cuatro metros, igual que el Cosquín. Los ríos San José y San Antonio aumentaron tres metros, y el Panaholma 1,5 metros.

No hubo evacuados, pero la Provincia pidió que se tomaran los recaudos necesarios para evitar situaciones indeseadas.

Las rutas en las Sierras permanecieron habilitadas.

En cifras

Centenar. Más de 100 personas de sectores humildes de la ciudad de Córdoba fueron evacuadas a raíz de los anegamientos de viviendas que sufrieron. Anoche, al menos 76 permanecían alojadas en el Polideportivo General Paz.

Aguacero. Llovió 153 milímetros desde las 9 del domingo hasta las 9 de ayer.

Una muerte. Durante la tormenta del domingo, un rayo alcanzó y mató a un joven de 22 años en barrio Guiñazú.

Miles sin luz. Se calcula que entre 25 mil y 30 mil cordobeses se quedaron sin luz entre el domingo y la víspera.
Fuente:
Las secuelas que dejó la última gran tormenta, 09/02/16, La Voz del Interior.

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