viernes, 12 de febrero de 2016

Jesús María, la que más avanzó para no volver a inundarse

La ciudad quedó fuera del plan de reconstrucción de Sierras Chicas. Con ayuda de la Provincia y un impuesto extra, avanzó con gaviones que no solucionan todo el problema, pero tranquilizan.

por María Virginia Guevara

En Jesús María, el río Gua­nusacate preparó el terrero con la inundación del 15 de febrero del año pasado. Y arrasó el 3 de marzo cuando, desaforado, llegó a cuadruplicar en al­gunos sectores urbanos el ancho de su cauce habitual.

El episodio dejó destrucción en zonas residenciales, y sembró páni­co sobre el futu­ro. Un año después -pese a que la ciudad no está incluida en el plan de reconstrucción de Sierras Chicas- es la que muestra los mayores avances en obras de defensa: ya se ejecutaron ocho mil metros cuadrados de gaviones para contener futuras crecientes, financiados en gran parte por el municipio y con aportes extras de todos los frentistas.

La obra consiste en la colocación de bloques de cuatro metros de largo, uno de alto y uno de ancho sobre las márgenes ampliadas del río. En su interior esos bloques contienen piedras de diferentes tamaños, y están contenidos por tejido de alambre. Según lo que señalan los estudios hidrológicos, se colocan tres o cuatro de esos bloques en escalera. El costo total de la obra proyectada es de entre 200 millones y 300 millones de pesos.

La primera etapa, que se encuentra en un 60 por ciento de avance, se desarrolla en cuatro frentes de obra y ya demandó 25 millones de pesos de maquinaria y mano de obra -que paga el municipio- y 14 millones de ­pesos en materiales, aportados por la Provincia. Faltan aún unos 25 millones de pesos para concluir la obra en cuatro kilómetros de márgenes del río.

El municipio desde abril pasado contrató a 60 trabajadores que se dedican exclusivamente a la reconstrucción. Gasta unos 600 mil pesos mensuales de sueldos y una cifra similar en alquiler de máquinas. Antes de la construcción de los gaviones, se desarrollan tareas de limpieza y encausado del río.

Pero lo más costoso vendrá después: el relleno detrás de los gaviones, para reforzarlos y reconstruir la costanera. Estos movimiento de suelo, son de un volumen muy importante, y el material necesario debe ser sacado, de los islotes formados en el centro del río.

Presupuesto arrasado
Los gaviones en 2015 consumieron casi por completo la partida de Obras Públicas del municipio. Desde este año, cada frentista de Jesús María aporta entre 50 y 80 pesos mensuales en concepto de tasa especial de reparación: son unos cinco millones de pesos anuales.

Desde el municipio reiteran que si se obtiene ayuda nacional o provincial para completar esa obra, la tasa se dejará de cobrar de manera automática. Las gestiones están iniciadas ante ambas jurisdicciones, y existe especial expectativa en la relación política que el intendente Gabriel Frizza mantiene con el presidente Mauricio Macri.

Demás está decir que la decisión del intendente Frizza causó polémica, del mismo modo que entre los afectados por la inundación se mantienen las críticas: quienes habían construido con Procrear, obtuvieron una condonación de deuda, pero todos los demás perdieron casas de alta categoría y reciben como oferta oficial un kit de materiales para algo más de 60 metros cuadrados.

Esa es la oferta de la Pro­vincia a cinco afectados que se quedaron sin casa, y en algunos casos, sin terreno. Además se asistió a otros 51 damnificados con ayudas de entre mil y cinco mil pesos, en muchos casos para alquileres de viviendas y también para reparaciones ­menores.

Puentes
Hay dos obras importantes que Jesús María espera de otras jurisdicciones.

La Provincia asegura que a fines de marzo estará lista la obra de reconstrucción del puente ente de la ruta E66 entre Jesus Maria y Ascochinga. La estructura se encuentra en obra y muy avanzada. Se está trabajando en la terminación de la losa y en el acondicionamiento de los accesos, pero están pendientes los muros de pro­tección.

Otros dos puentes que desvelan están sobre la ruta 9 norte. Uno al norte de Jesús María -llevado por el río en 2009, luego reconstruido por la Provincia y otra vez descalzado en 2015- y otro a la altura de Las Peñas, que tras la inundación fue reem­plazado por un vado provisorio. Para esas obras se espera la intervención del Gobierno nacional, pero hasta el momento no hubo anuncios al respecto.

Fuente:
María Virginia Guevara, Jesús María, la que más avanzó para no volver a inundarse, 12/02/16, La Voz del Interior.

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