miércoles, 17 de diciembre de 2014

Ciudad de Córdoba: Apuran la ampliación de la planta de cloacas

Mestremanda proyecto al Concejo y convocaría oferentes en abril. Quieren aumentar un 50 % la capacidad de tratamiento de Bajo Grande. La obra costaría $ 700 millones. Se pagará, en parte, con el Fosac y pretenden que además haya financiamiento empresarial.

Aunque la convocatoria todavía no fue formalizada por el Departamento Ejecutivo, se descuenta que el Concejo Deliberante de Córdoba sesionará en extraordinarias en lo que resta de diciembre (por las Fiestas y feriados puentes, son pocos los días hábiles disponibles) y al menos parte de enero.

En la agenda legislativa están pendientes la aprobación en segunda lectura del paquete económico para 2015 (presupuesto, ordenanza tarifaria y Código Tributario) y el casi seguro envío de un proyecto para actualizar la tarifa del servicio de transporte urbano, para que rija desde el primer minuto del año que viene.

También hay otra iniciativa a la que el Ejecutivo asigna fuerte prioridad: el intendente Ramón Mestre pedirá autorización al Concejo para llamar a licitación pública para ampliar la planta de tratamientos de efluentes cloacales de Bajo Grande que hoy brinda el servicio de saneamiento de los líquidos que generan unos 750 mil cordobeses.

La idea del oficialismo es iniciar el proceso licitatorio a más tardar en abril, previendo que las obras demandarían de dos a tres años de ejecución.

Bajo Grande puede procesar actualmente 10 mil metros cúbicos por hora y la pretensión oficial es ampliar esa capacidad en un 50 por ciento. De acuerdo a las dimensiones de los nexos principales que llevan los líquidos a esa planta depuradora, la ampliación máxima a la que se podría aspirar a largo plazo es completar los 20 mil metros cúbicos por hora.

Por ahora, la expectativa es más moderada en función de los costos que supone esa infraestructura, que la ciudad no está en condiciones de afrontar con sus ingresos generales.

Proyecto y plata
El envío de la iniciativa al Concejo no supone un proyecto ejecutivo ya desarrollado en su totalidad, sino pautas generales sobre cómo debería ampliarse la estructura de Bajo Grande y bajo qué técnicas de depuración.

Justamente, el detalle de las obras a encarar sería parte de las ofertas en la licitación, al igual que parte del financiamiento de los trabajos, cuyo costo global fue estimado en unos 700 millones de pesos.

La Municipalidad contempla cubrir al menos parcialmente esa inversión con los recursos provenientes del Fosac (Fondo para el Desarrollo de la Infraestructura Cloacal), que se nutre de un recargo del 10 por ciento que los vecinos de la Capital pagan cada mes con las boletas de Aguas Cordobesas.

Ese fondo recauda unos 90 millones de pesos al año, aunque obviamente los importes se moverán al ritmo de los aumentos tarifarios, que en el caso del servicio de agua potable están a la orden del día.

Mestre pretende sumar al Fosac aportes de la Nación y/o la Provincia, además de otras fuentes de financiamiento, que en su caso contaría como garantía de repago el fondo fiduciario constituido con el Fosac, que administra el Banco de Córdoba, y que de alguna manera marca la capacidad de endeudamiento del municipio para encara mejoras en la infraestructura cloacal.

“En tres años de obras, el Fosac cubriría casi 300 millones de pesos, lo que implicaría aproximadamente un 40 por ciento del costo total. Las condiciones de pago están. Lo que necesitamos es que alguien anticipe capital para el inicio de los trabajos”, admitió un funcionario mestrista.

Esta apuesta de Mestre viene precedida de algunos reclamos opositores por el supuesto desaprovechamiento de los recursos del Fosac, desde 2012 a la fecha.

Desde el Ejecutivo replican que todas las obras nuevas en materia de cloacas, se trate de redes domiciliarias, nexos, aliviadores o incluso reparaciones en Bajo Grande, se han venido cubriendo justamente con lo recaudado por ese Fondo.

Hay que recordar que tiempo atrás la Municipalidad afrontó incluso denuncias judiciales por el volcamiento de líquidos cloacales sin tratar al Río Suquía, a partir de distintas averías que registró la planta depuradora.

Ya tiene predio la obra de saneamiento que hará Eurnekian

Se trata de una planta de cloacas para 150 mil vecinos del sudeste de la Capital. 
Esa obra es parte de un convenio urbanístico con Corporación América.

La Municipalidad confirmó la adquisición de un terreno de 17 hectáreas en la zona sudeste de la ciudad, en cercanías de la autopista Córdoba-Rosario (a la altura del cruce con camino a Villa Posse), donde se levantará la planta de cloacas que debe construir la empresa Corporación América, como contraprestación a la ciudad por el convenio urbanístico que le permitirá edificar en predio del ex Batallón 141.

Esa definición era crucial para poder avanzar de una vez con los términos de dicho convenio, que especifican que antes de poner un ladrillo en los ex predios militares, el holding que lidera el empresario Eduardo Eurnekian deberá arrancar con la ejecución de dicha planta de cloacas.

Esa infraestructura debe servir, según se consignó en el convenio urbanístico, a unos 150 mil vecinos en la zona sudeste de la ciudad, que mayoritariamente no cuenta con infraestructura cloacal.

Cuando se aprobó el convenio con Corporación América, a comienzos de 2013, se calculaba que la obra podía costar alrededor de 100 millones de pesos, pero esa cifra ya quedó totalmente desactualizada.

A diferencia de Bajo Grande, está planta sí será modular, y arrancaría con una capacidad de tratamiento de unos 1.400 metros cúbicos por hora (es lo que se calcula para 150 mil personas), con previsiones para llegar a 20 mil metros cúbicos.

Al igual que ocurrirá con la ampliación de Bajo Grande, en este caso la Municipalidad entregará a Corporación América lineamientos generales de cómo debe ser la planta, pero le daría margen para que esa firma encare el proyecto definitivo y ejecute luego los trabajos.

Lo que sí variará es la concepción técnica: en este caso no necesariamente la depuración se realizará mediante percoladores, sino que con seguridad se echará mano a otros mecanismos más modernos. Aún no hay plazo de iniciación para los trabajos.

Aguas que huelen muy feo en media ciudad

La precariedad sanitaria de la Capital es una vergüenza desde hace décadas. Todos los políticos se acuerdan de los líquidos cloacales a la hora de planear la campaña.

por Rubén Curto

A los vecinos de la ciudad de Córdoba que piden a gritos la ejecución de obras algunas promesas de los políticos les suenan como la oferta de un exuberante banquete a un mendigo que implora apenas por un mendrugo en las esquinas, para paliar su hambre.

A quienes en los últimos años les pintaron un mundo de fantasías que incluía, por caso, ferrourbano, subterráneo, nudos viales, cierre del anillo de Circunvalación y pavimentación de centenares de cuadras, no hay mucho que los pueda sorprender o conmover ahora.

Ya están curados de espanto y saben de memoria que vienen tiempos políticos en que esa mágica ciudad de ensueños que describen los discursos intentará atraparlos nuevamente con espejitos de colores que luego, cuando la función termine, acabarán en una nueva desilusión.

Uno de los ejes de la pulseada que viene en la lucha por la Intendencia serán las cloacas. Con el transporte recién licitado y la basura a punto de seguir igual camino, la oferta discursiva ya apuntó para el lado de los caños bajo tierra.

Abrió el juego el exgobernador Juan Schiaretti prometiendo “cloacas para todos”, en un intento por congraciarse con ese electorado esquivo al PJ. “¿Por qué no las hizo cuando gobernó?”, se preguntan algunos vecinos con elemental sentido común.

Ahora, Ramón Mestre salió a mostrar sus cartas en este tema: quiere apuntalar con el Fosac parte de la ampliación de la planta de Bajo Grande, pero sabe que no alcanzará y que habrá que buscar también otro fondeo.

El dinero propio a la Municipalidad le alcanza para poco y nada, pero esa constatación tampoco conmovió demasiado a la Provincia a la hora de definir sus prioridades de obras en este distrito en los últimos años, pese a que allí vive el 40 por ciento de la población.

¿Habrá margen para que, por una vez, los intereses políticos cruzados por los distintos colores políticos que gobiernan Provincia y Municipalidad coincidan para dar una solución en serio a los vecinos? Si están dispuestos, las cloacas son una oportunidad inmejorable.

A la respuesta la tienen las autoridades, que en todos los casos deberían empezar a medir muy bien qué van a prometer a los vecinos de la Capital el año que viene, partiendo de la vergüenza que implica admitir que hace años la proporción de población que cuenta con servicio de cloacas apenas si araña el 50 por ciento.

Si esos números no se revierten, la Córdoba del atraso seguirá mostrando en cada esquina aguas servidas que salpican a todos por igual.
Fuentes:
Apuran la ampliación de la planta de cloacas, 16/12/14, La Voz del Interior.
Ya tiene predio la obra de saneamiento que hará Eurnekian, 16/12/14, La Voz del Interior.
Rubén Curto, Aguas que huelen muy feo en media ciudad, 16/12/14, La Voz del Interior.

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