Funam cuestionó el proyecto presentado por Schiaretti para plantar 17 millones de árboles porque no se realizaron estudios de impacto ambiental y no se contempla la situación crítica del bosque nativo.
El presidente de la Fundación para la defensa del Ambiente (Funam), Raúl Montenegro, denunció que el plan Forestando mi Provincia anunciado por Schiaretti es improvisado, ya que no considera la situación crítica en que se encuentra Córdoba por el desmonte de bosques nativos. Además, afirmó que es un programa ilegal debido a que no se realizaron los estudios de impacto que exige la ley nacional y provincial.
“Siento vergüenza ajena cuando veo el nivel de improvisación que tiene este plan”, manifestó Montenegro y destacó que el programa delineado por el gobierno provincial que pretende plantar 17.500.000 árboles a lo largo de cinco años no tiene ningún fundamento técnico.
Uno de los puntos más cuestionados del proyecto presentado días atrás en la Legislatura es que la mayoría de las árboles que se prevé plantar no serían nativos.
“El riesgo de forestar con especies exóticas de crecimiento rápido, sobre todo con ciertas especies, es que se está incorporando un problema nuevo”, indicó al respecto el biólogo. Y señaló que el gobierno pretende plantar una gran cantidad de eucaliptus, “uno de los árboles más nefastos” debido a que seca el suelo y agudiza las sequías, además del peligro que representa por los accidentes que produce.
Según Montenegro, la reforestación propuesta por el Estado provincial “termina siendo un gran negocio para quienes producen especies exóticas y un pésimo negocio para la sociedad”.
Contradicción
Funam, al igual que otras organizaciones sociales que integraron la Comisión de Ordenamiento Territorial de Bosque Nativo (Cotbn) promoviendo una ley que a último momento fue sustancialmente modificada, denuncian que la política oficial es contradictoria.
“No puede ser que primero firmen la promulgación de la Ley de Bosques y después de esa aberración jurídica la misma gestión promueva un plan de reforestación. Es como si tuvieras en una mano un plantín y en la otra una motosierra”, expresa Montenegro. Y agrega: “No se puede hacer un plan de forestación sin que esté coordinado con la protección del ambiente nativo”.
En el mismo sentido, el presidente de Funam advirtió que el principal problema de nuestra provincia es que queda menos del 5% de bosque nativo, por lo que “no puede haber una sola hectárea más de desmonte”, algo que la ley de bosques finalmente aprobada no prevé.
El biólogo calificó al programa como “un plan circo”: “17 millones de árboles en términos de ecosistema no es nada. Logísticamente plantarlos es un esfuerzo pero en términos ecológicos lo que se destruye con desmonte supera muchísimo esa cantidad”, alertó.
Además, el titular de la ONG ejemplificó esta contradicción con lo ocurrido en las banquinas de las rutas, donde “se ha permitido que cultiven en forma indiscriminada” ocasionando las nubes de polvo que en parte dieron origen al proyecto “Forestando mi Provincia”.
“No descarto que se judicialice”
El plan presentado este mes en la Legislatura violaría según Montenegro la ley provincial y nacional de ambiente, ya que ambas incluyen un decreto que establece la obligatoriedad de realizar evaluaciones de impacto ambiental, un aspecto que no fue contemplado por el programa de forestación.
“Se le exige a una pequeña industria que haga estudios de impacto ambiental y sin embargo el gobernador lanza un plan de plantación de 17 millones de árboles sin evaluación de impacto ambiental. Es una decisión marcadamente ilegal”, dijeron desde Funam.
El presidente de la organización que ya ha presentado diversas denuncias contra el gobierno provincial sostuvo: “No descarto que esto pueda llegar a judicializarse”. Y calificó como “peligrosísimo” que el proyecto no cuente con los estudios exigidos legalmente, ya que ello impide determinar los impactos ambientales de la forestación que se pretende realizar y que finalmente “sufrirá la sociedad”.
Desde el Estado afirman que se promoverá la plantación de nativas
Desde el gobierno provincial negaron lo afirmado por Funam y sostuvieron que “se va a promover la plantación de especies nativas”. Así lo expresó el subsecretario de Fiscalización y Control del Ministerio de Agricultura, Darío Fuentes, quien afirmó que el proyecto de forestación es un pedido “del conjunto del tejido social”.
El funcionario indicó que “si bien la provincia dispone de 13 millones de hectáreas productivas, el dato de plantar 17.500.000 árboles vinculados a una superficie de alrededor de 30 mil hectáreas en áreas productivas tampoco es un dato menor”.
Y añadió: “El proyecto plantea un componente importante de especies autóctonas (algarrobo, caldén, aguaribay, ceibo, jacarandá, lapacho). También hay especies exóticas, ambas especies brindan servicios ambientales”.
Acerca de la ausencia de los estudios de impacto ambiental, Fuentes señaló que se realizarán las certificaciones correspondientes pero que “está todo sujeto a la implementación de la norma” que el pasado 4 de abril ingresó a la Legislatura.
De cualquier manera, expresó: “El impacto ambiental es siempre positivo cuando uno está forestando con la intervención de profesionales técnicos”.
Según el subsecretario, todos los detalles técnicos se van a establecer a través de la reglamentación de la normativa una vez que sea sancionada y que en esa instancia se recibirán iniciativas de los interesados.
Además, Fuentes destacó que las distintas etapas de ejecución del plan provincial se llevarán adelante “de modo articulado con actores de la sociedad civil”.
Fuente:
Puntal.com.ar 21/04/2011
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