A
lo largo de las últimas tres décadas, el problema de la
contaminación de la curtiembre y la precaria salud de la población
de Nonogasta, sigue siendo una deuda incumplida por el Estado. No hay
ninguna razón ni argumento que justifique el sacrificio de toda una
población. Va en contra de los Derechos Humanos y civiles con los
cuales se rige la República Argentina. Ignorar o desviar la atención
hacia el ámbito laboral no es otra cosa que insultar los principios
y valores más fundamentales de la Constitución argentina.
En
base a la defensa de los Derechos Humanos, la salud y el trabajo en
condiciones dignas, denunciamos públicamente las declaraciones de la
Secretaría de Ambiente de la provincia de La Rioja ofrecidas por un
medio riojano, el pasado 7 de noviembre del presente año. Dichas
declaraciones vertidas por su Secretario mantiene el falso comentario
de que el agua y el suelo “no presentan ningún contamínate”.
Además acusa de “irresponsable” al abogado de los querellantes
particulares compuestos por vecinos de Nonogasta, por solicitar la
clausura de la curtiembre. Clausura que sería provisional hasta que
se garantizase la salud y las condiciones laborales dignas en
Nonogasta. La curtiembre debe trabajar de acorde a las leyes
vigentes, provinciales, nacionales y demás tratados internacionales
con carácter constitucional. No hay ninguna razón por la cual la
empresa burle de manera grosera las leyes.
La
única irresponsabilidad que ve la Asamblea el Retamo es la del
propio Secretario de Ambiente, que ante la evidencia científica que
la Prefectura Naval de la Nación presentó ante el Juez Federal, no
ha sido capaz de fiscalizar correctamente la situación ambiental de
Nonogasta, tal como le pidió el Juez Federal. También incurre en
grave irresponsabilidad por no defender los intereses de vida digna
de la población de Nonogasta y desviar la atención hacia los
puestos de trabajo. La responsabilidad de la Secretaría de Ambiente
es la de garantizar y velar las condiciones ambientales de la
provincia incluyendo Nonogasta.
El
Secretario de Ambiente está más preocupado por velar los intereses
de la curtiembre que la situación ambiental de Nonogasta en
perjuicio de toda la población y trabajadores de la curtiembre.
Realmente, él no está preocupado por la salud de los trabajadores,
porque si lo estuviere habría fiscalizado la empresa de manera más
eficaz.
¿Cómo
es posible que en los dos últimos análisis de la Prefectura Naval,
revelen que la contaminación es tan grande que puede poner en
peligro a los trabajadores de la curtiembre y a la población de
Nonogasta, y sin embargo, la Secretaría de Ambiente mantenga la
postura de que no hay contaminación?
La
segunda cautelar que el Juez Federal presentó en julio del 2018 a la
curtiembre, dando dos meses para su cumplimiento, decía lo
siguiente: “Que las medidas ordenadas a las que deberá dar
cumplimiento la firma CURTUME CBR S.A., son bajo apercibimiento de su
inmediata clausura en caso de no darse efectivo cumplimiento a las
mismas en los plazos establecidos”. Plazos ya vencidos y con la
comprobación científica de que la empresa no ha cumplido.
En
la misma cautelar también dice: “Líbrese oficio a la Secretaría
de Medio Ambiente de la provincia de La Rioja a fin de que por su
intermedio se proceda a la debida fiscalización, tanto al momento de
la notificación de las medidas dispuestas, como también en el
control posterior de su cumplimiento”. ¿Quién es el
irresponsable?
Fuente:
¡Nonogasta sigue en emergencia ambiental y sanitaria!, 14 noviembre 2019, Diario Chilecito. Consultado 15 noviembre 2019.
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