Un proyecto de
Resolución en la Cámara de Diputados de la Nación solicita al
Poder Ejecutivo Nacional que la planta NPU2 de dióxido de uranio
Dioxitek no sea trasladada de Córdoba a Formosa, sino a Ezeiza.
El Expediente
5810-D-2016 tiene, al menos, una cosa interesante: critica
fuertemente el proceder de la Comisión Nacional de Energía Atómica
en todo este tema. El proyecto de Resolución señala:
Qué es Dioxitek
S.A.;
que generó 57
mil toneladas de residuos radiactivos que fueron depositados junto a
la planta (el “Chichón” de Alta Córdoba) y de cómo se la
clausuró por altamente contaminante;
de cómo la misma
CNEA reconoce ante el Banco Mundial la actividad contaminante de la
planta y de cómo quiso trasladarla encontrándose con el rechazo de
las comunidades elegidas, advertidas de los graves daños ambientales
que había producido Dioxitek en el barrio Alta Córdoba;
de cómo el
gobierno de la Provincia de Formosa viola su Constitución y las
leyes entonces vigentes para poder aceptar en su territorio a
Dioxitek, derogando rápidamente las leyes que lo impedían y
ocultando esa derogación dentro del articulado de una ley de
presupuestos provincial que fue tratada sobre tablas;
de cómo la
audiencia pública no fue vinculante;
de cómo se viola
el Art. 17 de la Convención de Seguridad Nuclear de Viena que
obliga a dar parte a la República del Paraguay, lindera con el
predio;
de cómo la
Comisión Nacional de Energía Atómica clasificó a Dioxitek como
Planta Nuclear pero en Formosa le cambió el nombre por el de
Industrial;
de cómo se viola
también el Convenio N° 169 de la OIT (Ley Nº 24.071) que exige el
consentimiento informado de comunidades indígenas (la planta se
instala en el barrio Namqom);
de cómo
constituye una decisión irracional desde el punto de vista económico
y también logístico, costosa e ineficiente, ya que el uranio
llegaría al puerto de Buenos Aires y debería ser trasladado 1620
kilómetros hasta Formosa, para luego ser reenviado desde Formosa
nuevamente 1620 kilómetros hasta a Ezeiza donde se fabricaría el
combustible;
de cómo se
percibe una trampa oculta, ya que por vía terrestre no podrían
salir los residuos de Formosa, pues Chaco prohíbe por Ley N° 3902
en su territorio la circulación de uranio o cualquier material
radioactivo y Salta por la Ley Provincial N° 7070 prohíbe el
ingreso de residuos peligrosos;
Todo ésto es
reseñado en su presentación por los señores Diputados Hernandez
Martin Osvaldo (Formosa UCR), Villalonga Juan Carlos (CABA Unión
PRO), Albornoz, Gabriela Romina (Jujuy UCR), Monfort Marcelo
Alejandro (Entre Rios UCR), Nanni, Miguel (Salta UCR), Pastori Luis
Mario (Misiones UCR) y Marcucci Hugo Maria (Santa Fe UCR) quienes
concluyen que el sitio en vez de Formosa tiene que ser Ezeiza.
La propuesta no
tiene que ser allá o aquí. La energía nuclear pone al hombre ante
este tipo de problemas, riesgos, violaciones, y se ampara en la
corrupción y el ocultamiento. Sin ocultamiento y corrupción la
energía nuclear no puede funcionar.
No puede elegirse
a Ezeiza como una nueva zona de sacrificio, en el mismo lugar adonde
ya el Centro Atómico contaminó las aguas.
Porque dentro de
veinte años, habrá otro “chichón” radiactivo en Ezeiza, y las
autoridades nucleares de entonces estarán buscando adónde trasladar
la ignominia.
No se trata de
hacer buena gestión de la tecnología nuclear para la obtención de
energía eléctrica. No hay buenas prácticas ni buenas técnicas que
puedan evitar los atentados posibles, garantizar la prevención de
los accidentes como los ya ocurridos, ni gestionar con seguridad los
residuos y las plantas radiactivas al final de su vida útil, en
todas las centrales existentes, las obsoletas y en las que se
proponen construir.
El ecologismo
pugna por instalar un nuevo discurso crítico que interpele el
crecimiento capitalista y sus procesos insustentables que han llevado
a la civilización a la crisis, y que a la vez, de cuenta desde la
ética, de las prácticas de desarrollo que aseguren la permanencia
de la especie en el planeta, y de todas las demás especies, pues la
pérdida de una sola de ellas, nos empobrece como humanidad.
Ni en Formosa ni
en nungún otro lugar.
RENACE una vez
más exige el fin de la energía nuclear en Argentina.
Fuente:
Ni en Formosa ni en Ezeiza: NO a la energía nuclear, 20/09/16, Renace Argentina. Consultado 21/09/16.
No hay comentarios:
Publicar un comentario